Independiente enfrentará a River Plate con una capacidad limitada en su estadio, según una resolución emitida por la jueza Mariela Bonafine, del Juzgado de Garantías N°1 del Departamento Judicial de Avellaneda.
La medida fue adoptada en respuesta a una solicitud del fiscal Mariano Zitto, quien está al frente de la UFIJ N°4 de Avellaneda, pese a los esfuerzos del club por habilitar el estadio Libertadores de América-Ricardo Bochini al 100% de su capacidad.
La orden judicial permite el uso de las tribunas Santoro Baja y Pavoni Baja, pero con un aforo máximo del 55% en cada una, hasta que se presenten informes técnicos definitivos que certifiquen la seguridad estructural de las mismas.
La preocupación por la estabilidad de estas tribunas surgió después de que hinchas de Vélez y Huracán compartieran videos que mostraban desplazamientos y separaciones en los escalones durante los recientes partidos de Copa Argentina en el estadio.
Aunque estas imágenes alarmaron a muchos, las autoridades de Independiente minimizaron la situación, argumentando que las tribunas bajas del estadio están construidas con bloques premoldeados que permiten cierto movimiento y oscilación. Además, explicaron que los desplazamientos ocurrieron debido a la ruptura de soldaduras.
El arquitecto responsable del estadio, Alejandro Castro, descartó cualquier riesgo de derrumbe, afirmando que no se encontraron fisuras o fracturas en la estructura, aunque reconoció que no es la primera vez que se registra un incidente de este tipo.
