Impulsan la creación de una Línea Nacional de Asistencia contra Estafas Digitales y Fraudes de Datos

Ante el crecimiento de las estafas virtuales y el robo de datos personales, los senadores nacionales Guillermo Andrada y Fernando Rejal, del bloque Convicción Federal, impulsaron un proyecto de Ley para la creación de una Línea de Atención específica, destinada a asistir, contener y asesorar a las víctimas de estos delitos cada vez más frecuentes en el entorno digital.

La iniciativa responde a la preocupación por nuevas modalidades delictivas como phishing, vishing, skimming, smishing, estafas con criptomonedas y secuestros virtuales, entre otras. En los fundamentos del proyecto, los legisladores advierten que el uso cotidiano de las tecnologías, sumado a la falta de conciencia sobre seguridad en línea, ha incrementado la vulnerabilidad de los usuarios frente a estas amenazas.

Según el proyecto, esta nueva línea de asistencia permitirá a las víctimas no solo comunicar su situación y recibir orientación administrativa frente a entidades comerciales, bancarias o billeteras electrónicas, sino también contribuirá a generar una base de datos que refleje los métodos más utilizados por los delincuentes. Esto permitirá elaborar estrategias de prevención y concientización dirigidas especialmente a los sectores más expuestos.

El artículo 3 detalla que el alcance de la iniciativa abarca todo tipo de plataformas virtuales: redes sociales, buscadores, portales web, aplicaciones de mensajería, cajeros automáticos, sistemas de duplicación de tarjetas, billeteras virtuales y cualquier otra herramienta digital que requiera la provisión de datos personales.

El proyecto prevé que el Poder Ejecutivo Nacional designe la autoridad de aplicación encargada de administrar la línea y la base de datos resultante. Esta base funcionará como una herramienta clave para el análisis de patrones de fraude y la protección futura de los usuarios.

Los senadores destacan además la necesidad de incorporar mecanismos de verificación biométrica y medidas estrictas de resguardo de datos personales para fortalecer la confianza de la ciudadanía en el sistema de denuncias.

Finalmente, subrayan que experiencias similares ya funcionan exitosamente en otros países como Estados Unidos, España y Australia, donde existen líneas de atención específicas para fraudes digitales, demostrando su eficacia en la prevención y el combate de estos delitos emergentes.