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Elecciones en Estados Unidos 2020: qué dicen las últimas encuestas

La carrera electoral a la Casa Blanca entró en su recta final. A días de los comicios, y ya con muchos electores que emitieron su voto anticipadamente, el resultado sigue siendo incierto en gran parte debido al sistema electoral de Colegio Electoral de los Estados Unidos que recién se reunirá el 14 de diciembre para proclamar si Donald Trump consigue los 270 votos que necesita para conseguir su reelección.

Cabe destacar que en las últimas décadas, sólo Jimmy Carter y George Bush (Padre) intentaron su reelección a presidente de los Estados Unidos y no lo lograron.

Los nueve meses del proceso electoral arrancó formalmente el 3 de febrero con la primaria en Iowa transcurrieron en el marco de la pandemia que provocó el Covid-19. La enfermedad que comenzó en la ciudad de Wuhan, China, llegó al país del norte el 15 de enero, y lo hizo para convertir a esta nación en el epicentro de una pandemia que ya se cobró 400 mil muertes.

Elecciones anticipadas

El actual contexto de pandemia tuvo la particularidad de aumentar a niveles récord el voto anticipado en EE.UU. Hasta el momento, más de 93 millones de ciudadanos y ciudadanas estadounidenses han depositado su voluntad por correo, cifra que supera los votos del 2016 en esta modalidad, que según la comisión de asistencia electoral habían sido aproximadamente de 57 millones. Es la primera vez que, por ejemplo, en New York se puede votar de forma anticipada para una elección presidencial.

Esta modalidad de voto por correo adquirió una mayor relevancia no solo por la pandemia, sino por las críticas que ha vertido el presidente Donald Trump poniendo en duda su transparencia. El mismo Trump ya emitió su voto anticipado. Lo hizo en West Palm Beach (Florida), ciudad cercana a su mansión Mar-a-Lago, que desde 2019 consta a efectos legales como su domicilio particular. Allí expresó que “todo fue perfecto, muy estricto, acorde con las reglas. Cuando envías tu boleta, nunca podría ser tan seguro como esto”, sentando las bases de sus denuncias públicas de fraude.

Su postura la acompañan varios republicamos como el gobernador Greg Abbott de Texas quien solicito a la Corte Suprema de Justicia de colocar un único buzón por condado para las boletas de votación por correo, restringiendo los derechos políticos de la ciudadanía.

La medida afecta significativamente al bastión demócrata del condado de Harris. Justamente, el condado más grande del estado por población y uno de los más poblados en todo el país. Y tras esta decisión debió reducir sus 11 ubicaciones de entrega a solo una. También el condado de Travis, que incluye la ciudad de Austin, confiable para los demócratas, tuvo que limitar sus cuatro lugares de entrega a solo uno. Además otros condados grandes, tal es el caso de Tarrant, Dallas y El Paso, que ya contaban previamente con solo lugar de ubicación de entrega.

El gobernador republicano expresó que esta decisión permite mejorar la seguridad de las boletas electorales y también le otorga a los observadores electorales la posibilidad de seguir la entrega que hagan los votantes de las boletas por correo. Sin embargo, los críticos dicen que esto podría limitar el acceso a muchos electores.

Qué se elige en estas elecciones

En las elecciones generales 2020 de Estados Unidos, además de elegir futuro presidente y vice, también el Senado renueva un total de 35 bancas: 12 del Partido Demócrata y 23 del Partido Republicano. En las elecciones de 2018, los republicanos consolidaron su mayoría, hasta sumar 53 bancas.

Actualmente el Senado estadounidense, de cuya aprobación dependen las designaciones de funcionarios y jueces de la Corte Suprema, está integrado por una mayoría del Partido Republicano (53). El Partido Demócrata ocupa 45 bancas pero recibe el apoyo de los dos restantes independientes.

En tanto, la Cámara de Representantes (baja) debe renovar el total de sus 435 miembros, como ocurre cada dos años. En 2018, el Partido Demócrata recuperó la mayoría que había ostentado por última vez en el período legislativo 2009-2011.

La Cámara de Representantes está conformada actualmente por 232 demócratas, 193 republicanos, 1 libertario y 5 bancas vacantes, que se resolverán también el 3 de noviembre.

Aceptación de una derrota

Si bien Joe Biden sigue siendo el favorito en varias de las encuestas, todavía es difícil vaticinar un resultado electoral. Según las mediciones de Real Clear Politics, Biden se llevaría al menos 232 delegados frente a los 125 de Trump. No obstante, hay en juego otros 181 que podrían decantar la balanza finalmente hacia cualquiera de los dos lados.

Para el sondeo electoral de la Universidad del Sur de California, Biden subió 11 puntos porcentuales a nivel nacional, situándose en el 53% frente al 42% de Trump.

Lo mismo sucede con la encuesta realizada por Investor’s Business Daily y del Instituto de Política y Tecnología de Metrica: Biden mantiene una considerable ventaja nacional sobre Trump, con 7 puntos porcentuales para el candidato demócrata.

Como cada año, los estados bisagra o ‘swing states’ serán decisivos para el resultado final de las elecciones. Cada estado entrega la totalidad de sus votos a un solo candidato, por lo que conseguir estados como Florida, que cuenta con 29 votos, se torna crucial para ambos partidos.

Según los antecedentes electorales y las últimas encuestas, Donald Trump es claro favorito en 22 estados, en cambio Biden se espera que gane con cierta comodidad en 20 estados y en Washington DC. Los otros siete estados en los que no se perfila claramente el ganador se disputarán otros 137 votos en el Colegio que son con casi total seguridad los que van a definir al próximo presidente.

Lo más probable es que en la noche del martes 3 de noviembre no pueda anunciarse quién es el presidente electo. O que ambos se declaren ganadores, abriendo una batalla político-judicial potencialmente explosiva y mucho más disruptiva que la que en el año 2000 le permitió a Bush Jr. llegar a la Casa Blanca.

Trump repitió hasta el cansancio su pronóstico alarmista: “Será un fraude como nunca antes se ha visto. Esto no va a terminar bien”. Si, como indican las encuestas, los resultados son ajustados en los swing states y el voto por correo confirma el protagonismo que mostró hasta hoy –lo cual es lógico, por la pandemia-, lo más probable es que esto termine en una disputa judicial complejísima.

De ser así, la última palabra la tendrá la Corte Suprema, con tres de sus nueve miembros propuestos por Trump. Lo único seguro es que el sistema político y electoral estadounidense va a salir mucho más desprestigiado y deslegitimado de lo que ya está.

¿Por qué el mundo está en vilo por lo que pueda pasar en Estados Unidos? Porque lo que está en juego en estas elecciones tanto para la región como para el mundo, es la clase de liderazgos que queremos que conduzcan los destinos de nuestros pueblos en un mundo post pandemia, que va a requerir de políticas responsables

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