El presidente estadounidense, Donald Trump, responsabilizó a Hamás por el estancamiento de las negociaciones con Israel en busca de un alto el fuego en la Franja de Gaza. En declaraciones a la prensa antes de viajar a Escocia, aseguró que el grupo islamista “no quería alcanzar un acuerdo” y vinculó esa postura a la situación de los rehenes.
“Estamos con los últimos rehenes, y ellos saben lo que ocurre una vez que los entregan. Por eso realmente no querían cerrar un acuerdo”, argumentó Trump, aludiendo a un posible cálculo estratégico de la organización palestina.
Desde Israel, el primer ministro Benjamin Netanyahu coincidió con la visión del mandatario norteamericano y señaló a Hamás como el principal obstáculo para avanzar en las negociaciones. “Hamás es el freno para un acuerdo de liberación de los rehenes”, afirmó en un comunicado oficial.
Netanyahu añadió que, junto a Estados Unidos, están explorando nuevas alternativas para liberar a los cautivos, desmantelar el control de Hamás en Gaza y establecer una paz duradera en la región.