El ministro de Economía, Luis Caputo, aprovechó su participación en la asamblea del FMI en Washington para reunirse con inversores y brindar detalles sobre cómo seguirá el plan económico. El titular de Hacienda aseguró que la inflación continuará a la baja, aclaró que no es inminente la unificación de los mercados y dijo tener pleno respaldo político de Javier Milei.
Acompañado por el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, el ministro encabezó un encuentro privado que fue organizado por el banco JP Morgan y participaron unos 400 referentes del mercado.
El ministro de Economía explicó qué se encontró cuando se hizo cargo del Palacio de Hacienda, hacía adonde va el programa de ajuste y cómo es el respaldo del presidente Milei.
“La herencia que recibimos fue incluso peor de lo que esperábamos. No, no hay dudas. No puedo decirles el nivel de las cosas que presenciamos. Una vez que llegamos al poder, es realmente difícil de creer. Es difícil decirlo sin hacernos sentir mal a todos. Pero la realidad es que casi todo el mundo esperaba que ocurriera una crisis. Cuando dije que me iba a unir al Presidente, todos me dijeron, no seas el primero, porque el primero seguro es el que también se quema”, describió Caputo al comenzar su exposición.
Y añadió: “Esencialmente, estamos tratando de arreglar todos estos problemas siendo extremadamente ortodoxos en el lado fiscal y también en el lado monetario. El lado fiscal parecía una tarea imposible”.
“Incluso los economistas más respetados, decían que era imposible reducir el déficit fiscal más de dos, dos puntos y medio en un año. Y pudimos llegar a un superávit financiero en el primer mes. Y la razón por la que ponemos tanto énfasis en esto es porque, como todos saben, como formuladores de políticas en Argentina, no tenemos las mismas herramientas que en cualquier país desarrollado, porque no tenemos credibilidad. Así que no importa si llego y digo que vamos a llegar a un superávit fiscal en dos años, o que el Banco Central no va a financiar más al Tesoro, la gente simplemente no lo creerá. Dirán, está bien, a ver si cuando tengan 100.000 personas en la calle, a ver si pueden lograrlo. A ver cuándo vence un bono, si incumplen o piden el dinero al Banco Central”, enfatizó.
El ministro defendió su estrategia respecto de los distintos tipos de cambio. “Vamos al equilibrio fiscal que sirve como un ancla muy fuerte a pesar de que algunos intentan socavarlo. La segunda cosa que teníamos que hacer, y es de vital importancia aunque sé que al principio hubo muchas críticas, fue optar por tipos de interés reales negativos muy altos y muy severos. No teníamos más remedio, si no lo hubiéramos hecho probablemente ya estaríamos en hiperinflación”, señaló.
La convocatoria del JPMorgan para escuchar a Caputo llevaba como titulo “Argentina: estabilización, regulación y crecimiento sustentable”. En este marco, el comentario obligado del ministro estaba vinculado a la inflación y su evolución.
“La inflación continuará. Y la única razón es porque los argentinos están con esta tendencia a pensar que todo va a salir mal. Entonces ¿qué pasó? Casi todo el mundo fijaba el precio de sus productos en la tienda de primera línea con un dólar a 2000, porque eso es lo que les decían todos los economistas de Argentina. Esto va a 2000 el dólar, o a 3000. Los precios se fijaron a un tipo de cambio muy alto que no ocurrió”, dijo el jefe del Palacio de Hacienda.
Caputo dijo que esperaban que la inflación fuese “significativamente menor a lo que pronosticaban los economistas en Argentina. Y pronosticaban un 30% en diciembre; un 30% en enero y un 20% en febrero. La inflación acabó situándose en 25%, en Diciembre; 20% en enero; 13% en febrero, 11% en marzo. Y lo más probable es que vuelva a ser de un solo dígito en abril”.
“El mensaje más importante que quiero transmitirles es que no vamos a abandonar estas políticas, pase lo que pase. Y créanme, no he visto a nadie en mi vida con un nivel de convicción como el que tiene este Presidente. Elogio mucho al Presidente por esto, porque estando allí, sé que la reacción normal es dar marcha atrás cuando las cosas se ponen tensas, particularmente cuando no tienes apoyo político. Este Presidente nunca dará marcha atrás”, destacó.