En medio de crecientes tensiones internas dentro del oficialismo, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, redobló sus críticas hacia la vicepresidenta Victoria Villarruel por haber habilitado la reciente sesión en el Senado donde se aprobaron medidas como el aumento a las jubilaciones, la extensión de la moratoria previsional y la declaración de la Emergencia en Discapacidad.
Desde un acto en el partido bonaerense de Tres de Febrero, Bullrich sostuvo: “La vicepresidenta tenía que haberse puesto a la cabeza de decir ‘no voy a estar frente a una sesión que no es correcta, no es legal, no es legítima, porque no estaba convocada’”, en referencia a la presencia de Villarruel durante el debate promovido por bloques opositores.
La funcionaria, además, lanzó una frase que marcó el tono de su mensaje: “Que se ponga del lado de la gente, no de los senadores kirchneristas”. En ese sentido, advirtió sobre las consecuencias fiscales de lo aprobado, alertando que: “Si imprimimos de nuevo billetes, toda la plata que le va a entrar a alguien por este bolsillo, se la va a ir por este. Basta de hacer lo que se hizo durante años y salió mal”.
El enfrentamiento entre ambas dirigentes se había iniciado el día anterior en redes sociales, cuando Bullrich reclamó públicamente la suspensión de la sesión: “Levántese, Sra. Vicepresidente. No denigre la institución que preside. No sea cómplice del kirchnerismo destructor”, escribió en su cuenta oficial.
Ya en su discurso, Bullrich profundizó su postura y cuestionó duramente el rol institucional de la vicepresidenta: “Al menos siga del lado del pueblo que la votó para cambiar este país. No convalide a la corporación política más abyecta de la historia”. Y concluyó con una consigna que ya ha repetido en otras oportunidades: “Se necesitan gobernantes que estén del lado de las víctimas y no de los delincuentes”.