Milei y Modi sellan un acercamiento en la Casa Rosada con foco en comercio, litio y energía

Este sábado, en un hecho sin precedentes en más de medio siglo, el presidente Javier Milei recibió oficialmente al primer ministro de India, Narendra Modi, en la Casa Rosada. Se trata de la primera reunión bilateral formal entre ambos mandatarios y el primer encuentro presidencial de estas características desde 1968.

Modi, quien arribó anoche a Buenos Aires, inició su jornada con una ofrenda floral al Libertador General San Martín. Luego, se trasladó a la sede del Gobierno nacional, donde mantuvo un encuentro clave con Milei hacia el mediodía. La visita se da en el marco del cierre de la Asociación Estratégica lanzada durante el G20 en Río hace cinco años, y anticipa la próxima gira de Modi por Brasil y su participación en la cumbre de los BRICS.

A través de sus redes sociales, el mandatario indio expresó su entusiasmo: “Quiero reunirme con el presidente Milei y mantener conversaciones detalladas”. Y así ocurrió. En la agenda común sobresalieron temas vinculados al comercio agroindustrial —particularmente granos y aceites—, inversiones en litio, proyectos conjuntos en gas, tecnología nuclear, defensa y cooperación energética.

Para India, Argentina representa un socio clave en la región, no solo por su potencial como proveedor de alimentos y minerales críticos, sino también por las oportunidades que ofrece en infraestructura energética. La delegación india evaluó acuerdos de largo plazo que incluyan inversión privada y cooperación técnica.

En lo comercial, Argentina mantiene con India un intercambio superavitario que en el primer trimestre de 2025 rondó los USD 1.000 millones, con predominio del aceite de soja. La expectativa del Gobierno es ampliar esa base exportadora con acuerdos estructurales que garanticen estabilidad y apertura de nuevos mercados.

El encuentro se produce además en un contexto geopolítico particular para Argentina. A pesar de haber renunciado formalmente a ingresar al bloque BRICS, el país busca mantener vínculos multilaterales activos con potencias globales como India, China y Estados Unidos, y reposicionarse en el escenario internacional bajo una lógica pragmática.