El dirigente azulgrana oficializó por correo electrónico el fin de su licencia tras el escándalo por la cámara oculta en la que fue filmado recibiendo dinero. Su regreso genera fuertes tensiones internas y renuncias en la Comisión Directiva.
Marcelo Moretti decidió poner fin a su licencia y volver a ocupar la presidencia de San Lorenzo, después de tres meses alejado del cargo tras la difusión de un video en el que se lo veía aceptar una presunta coima para facilitar el debut de juveniles en Primera.
La vuelta del mandatario fue comunicada mediante un correo electrónico dirigido al club, donde además convocó a una reunión de Comisión Directiva para el lunes. Durante su ausencia, Julio Lopardo ejerció como presidente interino hasta su renuncia a la vicepresidencia el martes.
La reaparición de Moretti en la sede de Avenida La Plata, acompañado de un escribano, había anticipado su retorno, que ahora sacude aún más la vida institucional de un San Lorenzo en crisis. A la salida de Lopardo se sumó la dimisión de Javier Allievi, vocal titular del oficialismo, quien condicionó su renuncia a que otros dirigentes también abandonen sus cargos. Si 16 directivos dieran ese paso, el club quedaría acéfalo y se debería conformar una Comisión de transición hasta el llamado a elecciones.
Mientras tanto, el Tribunal de Ética de la AFA analiza el caso, aunque no existe un impedimento formal para que Moretti retome sus funciones hasta que la Justicia se pronuncie.
La tensión se incrementó en las últimas horas con la aparición de un nuevo video: Alejandro Rojas, el hombre que grabó la cámara oculta, reconoció que fue contratado y pagado para realizar la filmación. Según relató al portal Doble Amarilla, le pidieron registrar el momento en que Moretti recibía dinero, bajo el argumento de que se trataba de una deuda.
Con información de Página 12
