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Un gendarme de alto rango fue asesinado durante un robo

Guillermo Alfredo López, de 55 años, recibió un disparo cuando cuatro delincuentes quisieron robarle el vehículo.

Un alto oficial de la Gendarmería fue asesinado al intentar impedir el robo un auto en la localidad bonaerense de El Palomar, partido de Morón. La víctima, identificada como el comandante mayor Guillermo Alfredo López, de 55 años, recibió un impacto de bala a la altura de la axila en medio de un enfrentamiento armado con cinco delincuentes que, tras el tiroteo, se dieron a la fuga.

El crimen sucedió durante la tarde de este jueves, alrededor de las 18.30, en la esquina de Atahualpa e Intendente Villegas. López había llegado hasta allí acompañado de un sargento en un vehículo particular. En las imágenes del hecho se observa al coche estacionado con las balizas encendidas. El comandante mayor, al parecer, viajaba en los asientos traseros y se bajó en el lugar. En ese momento, los oficiales fueron interceptados por varios ladrones, que se movilizaban en un Toyota Etios negro

.Los asaltantes eran cinco, según se ve en la filmación registrada por una cámara de seguridad. Algunos estaban encapuchados, otros usaban gorra, y todos tenían puestos guantes. Salvo el conductor, todos descendieron del auto y abordaron al sargento, que estaba dentro de su vehículo.

“Tranquilo, levantá las manos”, les dijeron a punta de pistola. Ante la amenaza, López, que se encontraba sobre la vereda, sacó su arma e intentó evitar el asalto a su compañero. Lo que siguió fue un intercambio de disparos. Durante el tiroteo, la víctima recibió un impacto de bala a la altura de la axila, lo que le causó la muerte en el lugar, según constató el servicio de emergencias médicas SAME.

 

La autopsia reveló que lo mataron de siete balazos

La autopsia al cuerpo del gendarme asesinado en el barrio bonaerense de El Palomar reveló que los delincuentes lo mataron de siete balazos.

De acuerdo al resultado preliminar de la necropsia, Guillermo Alfredo López, de 55 años, sufrió dos impactos de entrada y salida, uno en el brazo izquierdo, otro en el antebrazo del mismo lado y otros dos en la extensión de ese miembro.

El informe señala que una bala ingresó en el glúteo derecho, la cual quedó alojada en aquella zona, mientras que los proyectiles restantes fueron en la axila izquierda con salida el por el dorsal y la última en el hueco extornal.

Según determinaron los investigadores, los agresores abrieron fuego contra el oficial tras ver que tenía un arma que nunca pudo utilizar para defenderse del ataque.

Los peritos de la Policía Científica recogieron de la escena del crimen un total de 13 vainas servidas.

Además, se constató que el Toyota Etios en el que circulaban los delincuentes fue robado un día antes en el partido bonaerense de La Matanza, y tras el homicidio lo prendieron fuego en Fuerte Apache, ubicado en Ciudadela, partido de Tres de Febrero.