En el día de hoy, el Papa Francisco se refirió a las tensiones políticas que se desataron en Perú el 7 de diciembre pasado, cuando el Congreso decidió destituir a Pedro Castillo y la entonces vicepresidenta Dina Boluarte asumió el poder.
En este sentido, el Sumo Pontífice pidió el cese la violencia en Perú “venga de donde venga” y exhortó tanto a las fuerzas de seguridad del país, como a los manifestantes que se expresan en las calles a respetar “los derechos humanos y el Estado de derecho”.
“Invito a rezar para que cesen los actos de violencia en Perú. La violencia apaga la esperanza de una justa solución de los problemas”, señaló Bergoglio tras rezar el tradicional Ángelus dominical.
“Animo a todas las partes involucradas a tomar la vía del diálogo entre hermanos de la misma nación en el pleno respeto de los derechos humanos y del Estado de derecho”, pidió Francisco.
“Me uno a los obispos de Perú al decir no a la violencia, venga de donde venga. No más muertes”
Las palabras del Papa llegan en un contexto en el cual, hasta el momento, 46 personas perdieron la vida tras las represiones policiales. Por su parte, en su última aparición pública el día jueves, Boluarte afirmó que su gobierno “está firme” y que “si bien sabemos que estas personas (los manifestantes) no van a cesar en su propósito, les vamos a caer con todo el peso de la ley”.