La eliminación del impuesto PAIS, vigente hasta el 24 de diciembre de 2024, traerá alivios para el sector automotriz. Este gravamen, que representaba un 7,5% sobre los costos de importación, dejará de aplicarse, lo que ha llevado a las principales automotrices del país a ajustar sus precios.
Toyota confirmó que sus vehículos importados desde Brasil tendrán una reducción del 3%, mientras que los modelos de producción nacional disminuirán un 1%. Según la compañía, el impacto del impuesto en los costos de fabricación local es menor en comparación con los importados.
Por su parte, Ford anunció una disminución del 1% en su lista de precios, buscando mantener su competitividad en el mercado y ofrecer un beneficio directo a sus clientes.
La medida, impulsada por el gobierno, busca aliviar la carga impositiva sobre los consumidores y promover un sector automotor más accesible.