Luego de la derrota en las PASO y la semana más crítica desde que está al frente del Gobierno, el Presidente oficializará a su nuevo gabinete.
Al borde de una fractura política sin precedentes Alberto Fernández superó la semana más crítica desde que es presidente y este lunes le tomará juramento a los nuevos ministros con los que buscará oxigenar la gestión, regenerar su capital político y fortalecer la economía. La carrera contrarreloj para revertir el resultado de las PASO comienza hoy mismo.
Luego de negociaciones que se prolongaron, con idas y vueltas de nombres, el viernes a última hora el Gobierno dio a conocer que el gobernador de Tucumán, Juan Manzur, asumiría la jefatura de gabinete en lugar de Santiago Cafiero, a quien el Presidente movió a la conducción de la Cancillería, ante la sorpresa del hasta ahora canciller, Felipe Solá, que se encontraba en México para representarlo en la Cumbre de la Celac.
La Casa Rosada también comunicó el desembarco de Aníbal Fernández en el ministerio de Seguridad, en reemplazo de la ministra Sabina Frederic; también, el expresidente de la cámara de Diputados, Julián Domínguez, volverá a conducir el ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, desplazando al formoseño Luis Basterra, al que el sector agropecuario veía como un funcionario falto de poder.
También, el presidente promovió al secretario de Políticas Universitarias, Jaime Perzyck, al mando del ministerio de Educación, dejando libre a Nicolás Trotta, y Daniel Filmus, que estaba a cargo de la Secretaría de Malvinas en la Cancillería, tomará mañana por la tarde el cargo de ministro de Ciencia y Tecnología, donde se desempeñaba Roberto Salvarezza.
Asimismo, el abogado Juan Ross fue el elegido para asumir la secretaría de Comunicación y Prensa, desplazando al cuestionado Juan Pablo Biondi, a quien la vicepresidenta Cristina Kirchner acusó abiertamente de realizar “operaciones de prensa” para desgastar su figura y al mismo frente electoral. Ross se desempeñaba hasta ahora como director de Publicidad Oficial.
La lista de nuevos funcionarios deja confirmados, implícitamente, a otros funcionarios que se plegaron a la jugada que forzó al Presidente a cambiar de decisión. Entre los sublevados que continúan, el primero es el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, que fue reconfirmado y viajó el fin de semana a La Rioja para asistir a Fernández en un cónclave con gobernadores del espacio. También continúan Fernanda Raverta (ANSeS), Luana Volnovich (PAMI), Victoria Donda (Inadi) y Pablo Ceriani (Aerolíneas Argentinas).
Tras la toma de juramento a sus ministros de esta tarde, el Jefe de Estado preparará anuncios económicos habían sido pensados antes de las elecciones con Cafiero, junto al ministro de Economía, Martín Guzmán; el de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; y el de Trabajo, Claudio Moroni. Los cuatro funcionarios venían siendo muy cuestionados por el kirchnerismo, pero finalmente, soportaron la tormenta de la semana pasada y permanecen al frente de sus carteras. Al menos por el momento. El interrogante estará abierto hasta días e incluso semanas después del 14 de noviembre. Qué sucederá con el Frente de Todos si en las elecciones generales la derrota es similar o peor a la de las Primarias. En estos casi dos meses, Alberto Fernández y su renovado Gabinete apostarán a una inyección de fondos en el conurbano y en las provincias propias para mejorar el rendimiento en aquellos distritos donde fueron derrotados y fidelizar en los pocos lugares donde lograron imponerse.
“Confío, sinceramente, que con la misma fuerza y convicción que enfrentó la pandemia, el Presidente no solamente va a relanzar su gobierno, sino que se va a sentar con su Ministro de Economía para mirar los números del presupuesto”, señaló Cristina kirchner en su verborrágica carta la semana pasada.
Ratificado pero débil luego de una semana en la que su presencia en el Gobierno estuvo al borde de un abismo, Guzmán deberá convertirse en un equilibrista entre las intenciones electorales del oficialismo y la endeble situación financiera y cambiaria de Argentina.