Sergio Romero, de Unión Obrera, cuestionó la conducción de ATE y defendió la formación de un nuevo sindicato

El dirigente de Unión Obrera, Sergio Romero, lanzó fuertes críticas hacia la conducción de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en Catamarca y señaló que la falta de representación real motivó el surgimiento de nuevas expresiones sindicales.

Romero sostuvo que en la provincia “quedó demostrado que el sector gremial que supuestamente representa a algunos de los afiliados está acéfalo”, al referirse a la escasa participación local en el paro nacional convocado por ATE.

No hubo repercusiones gremiales, no hubo llamados a asambleas ni consultas. Quedó más que demostrado el abandono gremial del empleado público de Catamarca”, expresó.

El dirigente apuntó directamente contra la conducción encabezada por Mario Arévalo, a quien cuestionó por su continuidad al frente del gremio. “Hace 15 años que tenemos a Arévalo al frente y venimos reclamando desde que asumió que jamás luchó por los trabajadores”, afirmó.

Romero aseguró que esta situación derivó en un profundo deterioro de la organización sindical dentro del sector estatal. “Todo se está tirando a la basura por culpa de esta gente que no asume el rol de secretario general”, concluyó.

Desde Unión Obrera consideran que este escenario justifica la necesidad de conformar un nuevo espacio sindical que recupere la representación y acompañamiento de los empleados públicos de la provincia.