En el marco de la nueva jornada de manifestación que llevaron adelante este jueves los trabajadores de Salud frente a la Legislatura Provincial, el diputado Francisco Monti brindó sus impresiones sobre el conflicto que parece no tener fin.
“El deterioro del sistema de salud es la crónica de un final anunciado. Lamentablemente acá hay un severo conflicto de intereses: entre los intereses privados del gobernador Jalil y el interés público, que entran en colisión, y donde claramente Jalil se está inclinando por defender su propio patrimonio”, manifestó el legislador.
Monti consideró, además, que en medio de las manifestaciones en reclamo por un salario digno “suceden cosas que inclinan la balanza hacia el sector privado”. “Si acá no hay una política de salarios dignos nos vamos a quedar sin salud pública”, dijo.
“El Gobierno no se tiene que encargar de comprar aviones, fincas, de darle plata a algunos amigos para que hagan negocios, lo que tiene que hacer el Gobierno es cambiar las prioridades y prestar los servicios públicos esenciales”, señaló el diputado.
“La decisión política es que el Gobierno eche mano en los más de $15.000.000 que tiene de superávit producto del ajuste en el sector público que ha hecho el gobierno con la inflación”, puntualizó.
Por último, remarcó: “Esto no es una pelea de políticos porque acá está el personal de salud y los ciudadanos de la provincia que quieren irse a atender en una posta u hospital público en condiciones dignas”.