Las ventas minoristas de las pymes aumentaron un 24% interanual en febrero, aunque a precios constantes, las cifras no logran compensar las pérdidas de 2024, cuando las ventas cayeron un 25,5%. Si bien la comparación interanual es positiva, las ventas registraron una baja mensual del 2,9% desestacionalizada, lo que refleja la volatilidad del sector.
El aumento en las ventas de productos como librerías, indumentaria escolar y artículos de perfumería estuvo impulsado por estrategias de descuentos y promociones, adaptándose a los nuevos hábitos de consumo, incluyendo un incremento de las ventas online y la posibilidad de pagos a cuotas. Sin embargo, los comercios enfrentan retos debido a la competencia informal, el aumento de los costos operativos y la falta de poder adquisitivo en los consumidores, quienes priorizan gastos esenciales.
En el análisis por sectores, se destacaron subas significativas en perfumería, alimentos y bebidas, y farmacia, con incrementos de hasta el 33% interanual. No obstante, sectores como el calzado y la marroquinería, y la ferretería, sufrieron caídas mensuales, siendo el primer rubro el que experimentó la mayor baja con un 5,4%.
Las expectativas para los próximos meses son cautelosas. Aunque muchos empresarios esperan una mejora gradual, la capacidad de adaptación a las condiciones económicas, la evolución de los costos y las estrategias de financiamiento serán determinantes para mantener el crecimiento. El sector sigue viendo a la reducción de impuestos como la medida más urgente que podría implementar el gobierno para aliviar la presión fiscal y reactivar el consumo.