Mientras Raúl Jalil presume a los cuatro vientos de su gran administración, llegó una sonora cachetada desde el lugar menos pensado: sus amigos de Casa Rosada.
El que disparó fue nada menos que Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y uno de los ejecutores predilectos de la motosierra de Milei, que tuvo la ocurrencia de poner a Catamarca como ejemplo de la pésima administración de los recursos públicos.
Sturzenegger fue al hueso y aseguró que si Jalil administra bien lo que recibe, la provincia podría sostenerse sin cobrar ningún impuesto ¡Tomá pa’ vo!
Nada de interpretaciones, lo dijo clarito: “Vamos a tomar una provincia como Catamarca. Catamarca recibe el 90% de sus recursos de la coparticipación y de las regalías mineras. Entonces fíjate qué notable esto. Si el gasto público en Catamarca bajará el 10% vos podrías eliminar todos los impuestos provinciales”, disparó el superministro imitado nada menos que en Estados Unidos por Elon Musk.
Sturzenegger fue más lejos todavía y anticipó que esa será una de las propuestas libertarias para gobernar la provincia en dos años más: “Nuestra responsabilidad con las provincias va a ser en el 2027, cuando nosotros pongamos candidatos a gobernadores, que esos candidatos van a decir ‘miren Javier Milei bajó el gasto público 30%, esto es lo que nosotros vamos a hacer en la provincia’. Y si yo hago esto en la provincia, voy a eliminar todos los impuestos provinciales. Va a ser sumamente interesante el debate político en 2027, porque vas a tener una fuerza política que va a estar diciendo a la gente ‘mirá quiero bajar este gasto público ineficiente y te lo voy a devolver con menores impuestos’ versus el modelo Kicillof”.
Un golpe al pecho de la administración jalilista, que lo que menos imaginaba era un ataque de Casa Rosada después de haber servido en bandeja la validación del DNU para negociar con el FMI, mediante el faltazo digitado de los diputados nacionales que responden a Raúl.
Así es la política, y algunos salieron a contestarle a Sturzenegger, pero de manera poco consistente, porque no hay persona capaz de negar que Catamarca desperdicia recursos y está mal administrada.
La interminable lista de 16 ministerios, los gastos oficiales, las pautas desparramadas, los contratos con amigos, el sobredimensionamiento del Estado, el parque automotor, etc. Todo indica que una ligera revisión de gastos le da la razón a Sturzenegger.
El Catucho