El Ministerio de Economía vuelve esta semana al mercado para renovar vencimientos por alrededor de $7 billones, en lo que será la última licitación de deuda en pesos de septiembre, el mes más desafiante del año en términos de compromisos del Tesoro. A pesar de la reducción en términos reales, el stock de títulos públicos en moneda local, medido al dólar contado con liquidación (CCL), ha alcanzado niveles no vistos desde la crisis del 2018 bajo el gobierno de Mauricio Macri, rondando los u$s90.000 millones. En el mercado señalan que el rollover de la deuda sigue dependiendo del cepo cambiario.
La Secretaría de Finanzas, bajo la dirección de Pablo Quirno, está ultimando los detalles del menú de instrumentos que ofrecerán a los inversores. El llamado con las condiciones se publicará el martes, la licitación se realizará el jueves y la liquidación será el lunes 30 de septiembre. Ese día vencerán aproximadamente $7 billones en deuda, principalmente una LECAP por $6,78 billones, sumados a unos $300.000 millones del bono dólar linked T2V4 y otros compromisos menores.
Con esta operación, se cerrará un calendario de vencimientos que alcanza los $14 billones en septiembre, el mes con más pagos de deuda en pesos del año. En la subasta previa, Luis Caputo sugirió una posible refinanciación parcial, aunque finalmente optaron por una leve suba de tasas para garantizar un rollover completo.
Deuda y el cepo cambiario
La acumulación de vencimientos de corto plazo es en parte consecuencia del traspaso de deuda del Banco Central al Tesoro, que culminó en julio con el lanzamiento de las LEFI. Un informe de la consultora 1816 advirtió que, si bien la deuda en pesos se ha reducido en términos reales y medidos en dólares oficiales, al CCL el stock se sitúa en un máximo desde 2018, alcanzando casi u$s90.000 millones en septiembre.
Este escenario plantea desafíos para el Gobierno ante un posible levantamiento de las restricciones cambiarias, con un Banco Central que mantiene reservas netas negativas estimadas entre u$s5.000 y u$s5.800 millones. El mercado de crédito en pesos sigue atado al cepo, según un informe de Eco Go, destacando que los flujos ajustan, pero los stocks de deuda continúan siendo un problema.
La deuda en pesos, hoy en gran parte en manos de los bancos, es un atenuante respecto a la crisis de las LEBAC en la era Macri. Sin embargo, la consultora 1816 advierte que los ahorristas podrían rescatar sus fondos y dolarizarlos, lo que afectaría la estabilidad del sistema financiero.