Un devastador terremoto de magnitud 6,8 ha sacudido Marruecos en las últimas horas, dejando una devastación sin precedentes en el país africano. Esta catástrofe se ha cobrado la vida de más de mil personas y ha dejado a centenares de heridos, además de causar la destrucción de numerosos edificios y forzar la evacuación de miles de residentes.
El Instituto Nacional de Geofísica marroquí ha informado que el terremoto comenzó alrededor de las 23:11 hora local y tuvo su epicentro en la localidad de Ighil, situada a 63 kilómetros al suroeste de Marrakech. El Ministerio del Interior confirmó la trágica cifra de 1.037 personas fallecidas y 1.200 heridas, afectando a varias provincias, incluyendo Al Haouz, Ouarzazate, Marrakech, Azilal, Chichaoua y Taroudant.
Este se ha convertido en el terremoto más devastador que Marruecos ha experimentado en más de un siglo, y la última tragedia de esta magnitud tuvo lugar en 2004 cuando un sismo de magnitud 6,3 sacudió la localidad de Al Hoceima, cobrándose la vida de 628 personas y dejando 926 heridos.
El impacto del terremoto también se sintió en la región española de Andalucía, específicamente en las ciudades de Huelva y Jaén, donde se registraron temblores.
Ante esta tragedia, el portavoz de las Naciones Unidas, Stephane Dujarric, emitió un comunicado en el que ofreció la asistencia de la organización al Gobierno marroquí en esta difícil situación.
