El Gobierno deberá desembolsar $1.673 millones sólo para pagar la impresión de boletas de papel que tendrán cada una de las listas internas que competirán en las próximas Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO), a pesar de que muchas de ellas no superarán el piso de votos del 1,5% que les permitirá acceder a las elecciones legislativas.
Serán 383 listas de 139 partidos y agrupaciones, que el Estado deberá financiar, entre otros gastos, con fondos para imprimir millones de boletas, un número que dependerá de la cantidad de electores del distrito en el que compitan. Para diputados nacionales competirán 282 listas, mientras que para senadores – se eligen solo en 8 provincias – habrá 101 propuestas electorales.
¿Cómo funciona el financiamiento electoral?
Las alianzas reciben fondos públicos por distintas vías: recursos para su desenvolvimiento electoral, que se reparten entre las agrupaciones de acuerdo a los resultados de elecciones anteriores. Además, perciben un monto de dinero en función de la cantidad de electores de cada distrito para financiar la impresión de boletas con los nombres de cada lista.
Para estas PASO, el Estado deberá desembolsar más de $1.700 millones para imprimir las boletas. Cada partido, no importa su tamaño, recibirá el dinero correspondiente para afrontar el gasto, equivalente a un padrón y medio de boletas de la provincia en la que decida competir.
La Dirección Nacional Electoral (DINE) dispuso en junio que el Estado debe financiar $1.33 por cada boleta. Ese número, multiplicado por un padrón y medio de electores de cada provincia, es lo que recibirá cada una de las listas que se presenten en las PASO.