Una semana después de que el presidente español Pedro Sánchez ordenara el retiro de la embajadora María Jesús Alonso Jiménez de Argentina, la canciller argentina Diana Mondino ofreció su perspectiva sobre el conflicto diplomático, calificando la reacción como “desproporcionada”.
Las imágenes del presidente Javier Milei acusando de “corrupta” a la esposa de Sánchez circularon en programas internacionales y redes sociales, desencadenando una respuesta contundente del gobierno español. Tras una conferencia de prensa en respuesta, José Manuel Albares Bueno, ministro de Asuntos Exteriores español, llamó a “consulta sine die” a Alonso Jiménez, quien cumplió con la orden y regresó a Madrid el pasado lunes 20 de mayo.
En el contexto del feriado nacional del 25 de mayo, crucial para Argentina, Mondino expresó sus opiniones. “Puede que haya habido algún error de un lado, no lo niego, pero la reacción del otro lado fue tan desmedida que sorprende”, afirmó durante su participación en el programa de televisión La Noche de Mirtha Legrand.
“La asociación de un Estado con una persona no es común. Esto fue una tormenta en un vaso de agua. No hay motivo para convertir un comentario críptico en un asunto de Estado”, agregó, señalando al Partido Socialista Obrero Español (PSOE) por inflar las circunstancias del conflicto.
En este sentido, Mondino subrayó que se trata de diferencias políticas y personales entre los líderes de ambos países. “Es una confusión evidente entre una persona y el Estado. Inicialmente fue un malentendido que, en lugar de corregirse, el Gobierno español optó por intensificar con la retirada de la embajadora. Desde nuestro lado, no existe ningún problema”, enfatizó.
Por último, elogió la conducta de la embajadora española en Argentina y resaltó que el gobierno argentino manejó el conflicto “con la máxima cortesía, altura y diplomacia, dejando en claro que es un problema con la persona y no con el Estado”.