Tras la aprobación del aumento de sueldos en el Senado, una decisión que ha suscitado una amplia respuesta de la sociedad y generado debate en el ámbito político, el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, lanzó duras críticas durante un discurso en la Fiesta de San Expedito.
“Todos estamos haciendo un esfuerzo gigante. Hagámoslo todos, por favor. Si mi bolsillo duele, que duela el de todos”, expresó el arzobispo ante una multitud de fieles congregados en la parroquia Nuestra Señora de Balvanera.
García Cuerva destacó las dificultades que enfrenta la población: “Vemos cómo cada persona está sacrificándose. Los abuelos deciden comprar menos para asegurarse el medicamento, los padres ajustan con los útiles escolares, aquellos que buscan trabajo sacrifican incluso comidas”. Con firmeza, agregó: “¡Vamos, todos juntos al esfuerzo!”.
En su discurso, el arzobispo subrayó el deseo de los argentinos de sacar adelante al país: “Queremos una Argentina unida, solidaria, que supere la crisis. Es nuestra causa más justa y urgente”.
“San Expedito, venimos a ti con nuestros corazones llenos de pedidos. Pero uno de ellos es especial y nos concierne a todos. Queremos una Argentina fraternal, en la que todos nos comprometamos con el esfuerzo necesario”, continuó.
En un llamado a la acción colectiva, García Cuerva concluyó: “Hoy quiero que, más allá de nuestras causas personales justas y urgentes, nos unamos en esta causa que es de todos”.