Adhemar Capital, Beta Bank, Callvu Servicios Bursátiles, RT Inversiones, Nova Inversiones, Stratton Sierra, son algunas de las financieras denunciadas este año en lo que se perfila como la mayor estafa de la historia en el país. Con decenas de detenidos y miles de damnificados que tienen millones de dólares en danza en el purgatorio de los pagos, el caos es total.
La justicia no da pie con bola, la plata no aparece, los presos ponen condiciones, la gente protesta en las calles, fiscales denuncian a jueces y el panorama pinta cada vez más oscuro. Hay decenas de políticos metidos hasta la médula en la joda, los tiempos de campaña se acercan inexorablemente y entonces apareció la solución clásica.
Alguien levantó el teléfono, y ordenó frenar en los medios amigos el tema de las financieras. Un par de llamados alcanzaron, y en los últimos días, la prensa empezó a hablar de otras cosas… minería, los goles de Messi, y referencias a inicios de pagos para bajar la espuma.
La movida es clara: hay que aliviar tensiones y empezar a relegar el tema de a poco, generando esperanzas y pateando la pelota para adelante. Que los más enardecidos se vistan de paciencia y no pierdan la fe.
Algo lógico para que no haya un estallido, pero apenas se averigua un poco más se ven las razones. ¿Alguien sabe a quiénes les pago? Pista: no es a un remisero que apostó la licencia a los Bitcoin.
Los pagos que se abrieron, se comenta, fueron para personajes muy bien acomodados y vinculados, de apellidos fuertes, que arreglaron lo suyo y mandaron al resto al freezer. Un par más para disimular, que los detenidos vayan saliendo y quedan todos en sala de espera.
La versión es muy fuerte. También acá se imponen los privilegiados. Podría despejarla la justicia dando a conocer qué pagos autorizó. ¿Podría?