En un encuentro cargado de tensiones y disputas, Independiente y River Plate no lograron desequilibrar el marcador y finalizaron empatados 1-1 en el Estadio Libertadores de América. Este resultado, si bien deja satisfechos a ambos equipos en la tabla de posiciones, deja un sabor agridulce para los dirigidos por Carlos Tévez, quienes habían buscado afianzarse en la cima de la Zona A de la Copa de la Liga.
Desde el inicio del partido, se palpaba la intensidad en el campo, reflejando la semana turbulenta que vivió Independiente, plagada de controversias en torno a decisiones arbitrales y disputas internas. A los 22 minutos del primer tiempo, el colombiano Miguel Borja, máximo goleador del campeonato, adelantó a River Plate con un tanto que contó con la complicidad de un desvío que dejó sin reacción al arquero local, Rodrigo Rey.
Sin embargo, Independiente no tardó en responder. A los 37 minutos, Gabriel Ávalos capitalizó un centro desde la derecha, tras una desafortunada reacción de la defensa visitante, y anotó el gol del empate, rompiendo así una sequía personal de 10 partidos sin marcar.
En la segunda mitad, River Plate mostró un dominio superior en el juego, acentuado aún más con la entrada de Pablo Solari en lugar de Claudio Echeverri. A pesar de los intentos por parte de ambos equipos, el marcador no volvió a moverse, dejando un gusto amargo para Independiente, que vio cómo un penal no sancionado sobre Ávalos generó fuertes reclamos por parte de la afición y del cuerpo técnico.
El encuentro culminó de manera polémica cuando el árbitro Nazareno Arasa expulsó a Iván Marcone, de Independiente, por una falta sobre Solari, quien se dirigía solo hacia el arco rival. Esta decisión avivó aún más las tensiones en el estadio.
Con este empate, ambos equipos continúan liderando la Zona A de la Copa de la Liga con 18 puntos, manteniendo sus posiciones de privilegio en la tabla. En la próxima jornada, Independiente visitará a Deportivo Riestra, mientras que River Plate recibirá a Gimnasia y Esgrima La Plata.
