En un reciente comunicado, el gobierno de China hizo un llamado al primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, instándolo a detener su avance en la ciudad de Rafah para “evitar un desastre humanitario aún mayor” en la región.
A pesar de los numerosos llamamientos internacionales para el cese del conflicto, el gobierno de Netanyahu se mantiene firme en su posición. Tras la solicitud del presidente Joe Biden en una llamada telefónica para que Israel establezca un plan “creíble” para proteger a los civiles, China emitió su pronunciamiento a través de un comunicado.
En este, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China instó a Israel a “detener su operación militar lo antes posible, hacer todos los esfuerzos para evitar víctimas civiles inocentes […] y prevenir un desastre humanitario más grave en la zona de Rafah”.
Según informes de la agencia internacional AFP, China afirmó que su gobierno “se opone y condena las acciones que causan daño a civiles y violan el derecho internacional”. Rafah, en el norte de la Franja de Gaza, se ha convertido en un refugio para más de un millón de civiles que han sido evacuados de la zona de combate.
Mientras tanto, las milicias israelíes tienen la intención de avanzar por tierra en el sur de la región después de los ataques en el norte. Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) argumentan que este movimiento es necesario para eliminar al grupo islamista Hamás y lograr el objetivo de recuperar a los rehenes aún en poder de Hamás desde el ataque del 7 de octubre.
