Familiares y amigos de Miguel Ángel Ferreyra marcharon este lunes en pedido de justicia luego de que el fiscal Laureano Palacios otorgara el beneficio de prisión domiciliaria a Mónica Murúa, una de las imputadas en la causa. De acuerdo a la defensa de la mujer, la solicitud responde a un problema de hipertensión que sufriría Murúa.
“Esta asesina no tuvo piedad para terminar con la vida de mi hijo, quien aún estando muerto lo seguía golpeando. Es una persona que en ese momento no estuvo enferma para hacer lo que hizo y tiene que estar donde tiene que estar“, sostuvo Isabel, madre Miguel Ángel Ferreyra.
La querella, representada por el abogado Sebastián Ibáñez, pedirá la nulidad de todo lo efectuado y que se realice nuevamente la revisión médica con un médico de parte. La nota completa
