Cambia, todo cambia

Atrás en el tiempo quedó el Raúl Jalil que encabezaba los reclamos de los gobernadores a Nación y hacía planteos por la distribución de fondos. Hoy, los mandatarios del PJ se reunieron y emitieron un comunicado denunciando el desfinanciamiento de las provincias y exigiendo la distribución de recursos. Una demanda recurrente de los distritos al Gobierno central en los últimos dos años, de las que el catamarqueño participaba activamente. Pero hoy brilló por su ausencia. Y, aunque no sorprende, no deja de ser notorio.

 

El reclamo de los gobernadores peronistas exigía la recuperación de un “federalismo inclusivo”, advirtiendo sobre el creciente desfinanciamiento que atraviesan las provincias. Fue a través de un documento conjunto en el que cuestionaron las políticas del Gobierno nacional, expresaron su oposición a iniciativas como la reforma laboral y anticiparon el impulso de una agenda parlamentaria común.

 

El pronunciamiento, titulado “Recuperar la Argentina federal e inclusiva”, lleva la firma de los mandatarios Axel Kicillof (Buenos Aires), Gildo Insfrán (Formosa), Sergio Ziliotto (La Pampa), Ricardo Quintela (La Rioja), Gerardo Zamora (Santiago del Estero), Elías Suárez (Santiago del Estero) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego). Pero no la de Jalil, que pasó de vocero de los planteos a

 

Aunque parezcan recuerdos de otra era, hasta hace unos meses el Gobernador señalaba a la administración Milei por los recursos podados a Catamarca. Sin ir más lejos, la campaña electoral se basó en remarcar las obras que el gobierno provincial había logrado ejecutar aún sin la financiación nacional. Enumerando la ejecución de proyectos con fondos propios en contraste con las políticas de ajuste libertarias.

 

En ese mismo contexto, desde el oficialismo local insistentemente se machacó contra Nación por los recortes en medio de una disputa parlamentaria por declarar la emergencia en pediatría y discapacidad, y que Catamarca apoyó en el ámbito legislativo.

 

En este compendio también se podrían incluir los reclamos por la supresión de fideicomisos, la distribución de los ATN, las propuestas de coparticipar el impuesto a los combustibles, la oposición a los cambios tributarios entre otros. De hecho, Jalil tuvo asistencia perfecta a los encuentros de gobernadores en el CFI cuando se agrupaban para potenciar el reclamo.

 

Idéntica postura mantenía a menos de un mes de las elecciones, cuando aprovechó la visita del entonces Ministro del Interior, Lisandro Catalán, a quién le hizo saber el descontento por la desfinanciación de obras ya comprometidas. Además de enrostrarle todo lo que la Provincia había tenido que costear con fondos propios por el incumplimiento o repliegue económico de Nación.

 

Pero ahora, ese Jalil ya no existe. De repente los reclamos, las diferencias y las deudas parecen haber desaparecido. Y todo se tornó a una llamativa armonía entre la Provincia y Nación. La ruptura del bloque de diputados en el Congreso fue un botón, un síntoma de la nueva sintonía. La ausencia de hoy, una confirmación.

El interrogante pasa por saber cuál fue el trueque. Que recibió o recibirá la Provincia a cambio de su nueva postura. Si el traspaso de YMAD fue todo el premio o si el Presupuesto nacional traerá bonus para Catamarca.

 

Como sea, el cambiazo  está consumado. Hace unos meses atrás, Jalil habría firmado ese documento y la foto del encuentro lo habría retratado en la mesa junto a los demás mandatarios peronistas. Seguramente habría declarado públicamente su exigencia de diálogo y negociación, y habría apoyado una avanzada legislativa para presionar. Pero hoy, ya no. Cambia, todo cambia.