En un paso decisivo frente a la creciente tensión diplomática entre Argentina y Venezuela, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, anunció el envío de ocho efectivos de la Gendarmería Nacional para fortalecer la seguridad de la embajada argentina en Caracas.
En declaraciones radiales, la funcionaria subrayó la urgencia de resguardar la integridad de la misión diplomática argentina y garantizar la seguridad tanto del personal diplomático como de los ciudadanos venezolanos que han encontrado refugio en sus instalaciones.
“Es nuestro deber cuidar nuestra embajada y proteger tanto a nuestro personal como a las personas que se han asilado en ella”, enfatizó Bullrich. Además, alertó sobre la situación de riesgo que enfrentan algunos de los refugiados, señalando que “hay individuos que están siendo buscados por el régimen de Maduro”.
Bullrich también hizo referencia a las denuncias de un supuesto asedio a la embajada argentina en Caracas por parte de individuos vinculados al régimen venezolano. En este sentido, destacó que “la embajada ha tomado todas las precauciones necesarias, pero el asedio persiste”, evidenciando la gravedad de la situación.
Por otro lado, un opositor venezolano refugiado en la embajada argentina confirmó estas preocupaciones, destacando que “personas afiliadas al régimen se han llevado fusibles de luz”, lo que subraya la tensión y la vulnerabilidad de quienes se encuentran dentro de la embajada en medio de este contexto diplomático tenso y desafiante.