“Tenemos previsto que el domingo próximo se acabe la cuarentena”, sostuvo el mandatario, pero que el tema “es día a día” de acuerdo a los acontecimientos.
El jefe de Estado señaló que “la salida tiene que ser muy cuidada” y que la intención es “volver al trabajo poco a poco, porque el mayor canal de contagio son los medios de transporte”.
Sin embargo, aclaró que en algunos casos se mantendrán las restricciones y puso como ejemplo a la Administración Pública, que continuará ejerciendo trabajo a distancia.
Dijo además que, según le transmitieron los infectólogos, “la primera quincena de mayo será el momento más duro de enfrentar”.
Consideró que el fútbol va a ser “una de las actividades que más va a sufrir la salida de la cuarentena”, aunque deslizó que “sin espectadores se puede ir flexibilizando poco a poco”. En ese sentido, aclaró que “con espectadores, es imposible” el regreso a la actividad de las distintas categorías, ya que los estadios serían un posible foco de contagio. Al ser consultado sobre una eventual fecha, remarcó: “No sé cuándo van a poder volver”.
Por otro lado, evaluó que no “cabe ninguna duda” de que “alguien hizo mal las cosas” este viernes para que se generen desbordes en loa bancos que pagaban jubilaciones, mientras admitió que la situación le causó “malestar”.
“Fue un episodio y creo que eso hoy no va a pasar”, confió el primer mandatario en el inicio de la segunda jornada de cobro de jubilaciones y beneficios sociales para quienes no cuentan con tarjeta de débito.
“Lo que es importante es que todo tengamos en cuenta la importancia de la cuarentena”, insistió y se lamentó por las extensas filas en pleno aislamiento social: “Pucha, todo este esfuerzo en un día lo ponemos en peligro”.
Al analizar que fue un conjunto de factores lo que provocó la multitud en las entidades financieras”. “Hubo un acto de confianza porque todos creemos que todos entendemos de qué se trata la cuarentena. Se mezcló gente que cobraba la Asignación Universal y la ayuda especial con personas que no habían cobrado en su momento la jubilación. Muchos abuelos ven lo bancos abiertos y dijeron ´vamos a cobrar la jubilación´”, enfatizó y puntualizó: “Mandamos a su casa a lo que no les toca cobrar”.
Consideró además que bajar el sueldo de los funcionarios sería “un acto muy demagógico” y subrayó que sus ministros “no son ñoquis ni reciben sobres por izquierda”.
“Tengo un Gobierno de ministros y funcionarios que no tienen fortunas, no tienen cuentas en el exterior, no tienen bienes, no tienen empresas: realmente viven de su sueldo. Los llamo a cualquier hora y atienden. Sé que los funcionarios no están robando la plata”, sostuvo el mandatario.
Afirmó que adoptar esa propuesta sería “un acto muy demagógico”. “No tienen los argentinos un presidente que trabaja una semana y se toma dos de vacaciones”, explicó. Y concluyó: “No vengan con esas cosas, porque después nos llaman populistas a nosotros”.
Por último, cuestionó la actitud de su par brasileño, Jair Bolsonaro, ante la pandemia de coronavirus y consideró que se trata de “un peligro exponencial” para la región.
“Lo de Brasil es de un peligro exponencial. No tomar nota de los que significa este virus y pensar que la voluntad divina nos va a salvar, vamos por mal camino”, sostuvo el mandatario.