Las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por la deuda de unos US$44.000 millones abrió una nueva interna en el Gobierno.
Mientras el ministro de Economía, Martín Guzmán, apura el acuerdo para mayo, con vistas a iniciar el diálogo con el Club de París antes de caer en default, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner no quiere comprometer las elecciones legislativas de octubre con un plan de ajuste y busca estirar la resolución para después de los comicios.
La primera vez que se supo sobre las intenciones de la expresidenta fue a partir de un artículo publicado este domingo por el Financial Times en el que fuentes muy vinculadas a la titular del Senado confirmaron que busca “postergar” el acuerdo para evitar el “recorte de gastos antes de las elecciones” de octubre. También hace referencia a la necesidad de aguardar que “la pandemia se haya aliviado”.
Este martes, el representante de la Argentina en el directorio del FMI, Sergio Chodos, dijo que “resultaría aceptable finalizar estas negociaciones con el FMI antes de la fecha límite con el Club de París en mayo de 2021″, pero que “no es una prioridad” para el Gobierno cumplir con esos plazos.