Este sábado por la noche se vivieron momentos de pánico y tensión a bordo de un avión de United Airlines, que se dirigía desde la ciudad estadounidense de Houston hacia el Aeropuerto Internacional de Ezeiza con casi 300 argentinos a bordo.
El Boeing 787, que había partido a las 20.40 del Aeropuerto Intercontinental George Bush, tuvo que regresar de urgencia dos horas después de su despegue tras quedarse sin suministro eléctrico.
Alrededor de las 22.30 horas, el avión se quedó totalmente a oscuras y la tripulación tuvo que poner en práctica el protocolo de emergencia y tratar de tranquilizar a las pasajeros que se vieron sobresaltados por este inconveniente técnico.
Por auto parlante, el piloto les explicó a los pasajeros que iban a activar el grupo electrógeno y que debían volver a Houston para reparar la aeronave.
El representante de modelos Leandro Rud, uno de los argentinos que se encontraban a bordo, fue quien registró con fotos y videos el desesperante momento que tuvieron que padecer hasta que finalmente el avión tocó tierra.
Tal como se puede apreciar en una de las filmaciones, el pasillo del avión solo tenía activadas las luces blancas de emergencia y todos fueron obligados a permanecer en sus asientos con el cinturón abrochado.
Al aterrizar el Houston, los pasajeros se sorprendieron por el enorme despliegue de bomberos, policías y personal aeroportuario que había en la pista.
“Por suerte ninguna persona resultó herida”, precisó Rud, quien al igual que el resto de los argentinos debió pasar todo la noche en el aeropuerto de Houston.
“Nos dieron comida y un voucher de USD 10”, contó el representante de modelos. “El personal de United también nos hizo completar un formulario para exigir USD 150 de reembolso por los daños ocasionados”, detalló.
Al indagar sobre los inconvenientes que ocasionaron el corte de luz, fuentes cercanas a la empresa precisaron que “el avión se quedó sin el generador eléctrico de la turbina 1”.
“La aeronave tiene dos turbinas y cada una de ellas tiene un generador. Incluso hay un tercer generador auxiliar. Pero al desconectarse el generador 1 la computadora comenzó a dar mensajes de error y los pilotos decidieron volver al aeropuerto de Houston”, detallaron.
Una vez aterrizados en el Aeropuerto Intercontinental George Bush cambiaron el avión y buscaron una nueva tripulación para continuar con el vuelo hacia Buenos Aires.
“La vuelta a Ezeiza se demoró un poco más de lo previsto porque hubo que volver a conseguir la autorización de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) para el nuevo horario de aterrizaje y el control de sanidad porque los PCR de los pasajeros podrían estar vencidos por la demora”, informaron.
Una vez que la ANAC aprobó el vuelo, el avión de United partió a las 10.26 (hora de Estados Unidos) y está prevista su llegada a la Argentina para las 22 horas (hora local).
Debido a las restricciones vigentes en el país por la escalada de casos y muertes por COVID-19, el gobierno decretó que solo pueden ingresar al país desde el exterior unos 2.000 pasajeros por día y la separación entre cada vuelo que arribe debe ser de dos horas.
Una vez llegados al país, todos los pasajeros deben realizarse el test de COVID-19. Los que dan negativo pueden dirigirse a sus domicilios, permanecer en cuarentena por una semana y luego volver a repetirlo para ser dados de alta. Los que dan positivo, son llevados a hoteles -a cargo de cada uno de los infectados- donde quedan aislados hasta superar la enfermedad. Estas medidas están vigentes hasta el 11 de junio próximo.