Al menos 10 personas murieron y varias resultaron heridas en un tiroteo ocurrido en un supermercado en la localidad estadounidense de Buffalo (Nueva York).
“Estamos investigando este incidente como un crimen de odio y un caso de extremismo violento por motivos raciales”, dijo Stephen Belongia, agente especial a cargo de la oficina de campo del FBI en Buffalo, en una conferencia de prensa.
La fiscalía del distrito del condado de Erie (norte de Nueva York) identificó al joven como Payton S. Gendron, un joven blanco de 18 años.
Gendron, que había sido definido previamente como un supremacista blanco, ha sido detenido sin derecho a fianza, bajo los cargos de homicidio en primer grado, y comparecerá por primera vez el martes por la mañana ante el juez.
El tirador ingresó al supermercado con un rifle y abrió fuego, dijo un funcionarios que habló con AP bajo condición de anonimato. Los investigadores creen que el hombre pudo haber estado transmitiendo en vivo el tiroteo y estaban investigando si había publicado un manifiesto online, agregó.
Los agentes federales entrevistaron a los padres de Payton Gendron, el adolescente que disparó 50 tiros en la tienda que mató a 10 personas, dijo un funcionario de la ley el domingo.
Gendron, de 18 años y natural de Conklin (Nueva York), se declaró “no culpable” de asesinato en primer grado tras el ataque del sábado. Está detenido sin fianza y se enfrenta a cadena perpetua. El presunto asesino, que tiene que volver a comparecer ante el tribunal el próximo jueves, está actualmente bajo vigilancia por suicidio y está recluido en una unidad separada de otros reclusos, dijo el sheriff del condado de Erie, John García, en la conferencia de prensa del domingo.
La policía cree que el ataque había sido planeado durante meses y añadió que está investigando un manifiesto de 180 páginas que Gendron supuestamente publicó antes de perpetrar la masacre y que incluía un plan para conducir a varios condados para llevar a cabo el tiroteo en el Tops Friendly Market.
Gendron viajó hasta Buffalo, al borde del lago Erie -en la frontera con Canadá- desde su ciudad natal de Conklin, a más de 320 kilómetros de distancia, dijo la policía.
Vestía chaleco antibalas, portaba un rifle de asalto, según el Departamento de Policía local, que precisó que de los 10 muertos y tres heridos, 11 eran afroameicanos. Además, Gendron llevaba un casco equipado con cámara para transmitir su crimen en vivo por internet.