Aunque la mayoría del material desclasificado sobre la presencia de nazis en Argentina no aporta grandes novedades, un documento en particular volvió a generar interés en las últimas horas. Se trata de un memorándum confidencial de la Policía Federal, fechado en julio de 1960, en el que se describe el misterioso caso de la lancha pesquera Felicitas, que habría sido utilizada para facilitar una fuga clandestina desde la ciudad de Necochea.
El archivo, que lleva la firma del entonces Director de Coordinación Federal, Capitán de Fragata Paul A.V. Angelini, forma parte de los cerca de 2.000 documentos digitalizados por el Archivo General de la Nación y se destaca por sus detalles sobre un posible intento de escape de colaboradores del nazismo, ocurrido semanas después de la captura del criminal de guerra Adolf Eichmann.
Según el parte policial, la embarcación zarpó del puerto de Quequén con provisiones para quince días, sin llevar equipos habituales de pesca, pero con lonas amplias y un transmisor en perfecto estado. El dato que disparó la sospecha fue que la Felicitas terminó varada en la costa uruguaya y, según versiones, habría trasladado a varios pasajeros no identificados, incluyendo a un ex secretario de la CGT local y a un ex funcionario policial del régimen depuesto en 1955.
El informe menciona al patrón de la lancha, Antonio Ricci, quien días antes fue visto en el Hotel San Martín de Necochea junto a un tripulante llamado Esteban Alarcón y un tercero desconocido, con quien habrían acordado el traslado de individuos “de tendencia nacista”, preocupados por el arresto de Eichmann ocurrido apenas unas semanas antes, el 11 de mayo de 1960.
Lo más llamativo fue que la embarcación zarpó con autorización de la subprefectura marítima, aparentemente por la relación de amistad entre Ricci y el jefe local de esa repartición. En paralelo, vecinos de Necochea notaron la inusual tranquilidad de los familiares de la tripulación, lo que alimentó aún más las sospechas de una operación encubierta y planificada.
Un segundo documento, el “Parte 884” de la SIDE, fechado el 9 de junio de 1960 —menos de un mes después del secuestro de Eichmann—, ya había advertido sobre la aparición de la lancha varada en territorio uruguayo y la posibilidad de que transportara a prófugos del régimen nazi o incluso a figuras locales vinculadas al poder previo al golpe militar de 1955.
Aunque nunca se supo el destino de los pasajeros y no se hallaron pruebas concluyentes, el caso de la Felicitas permanece como uno de los episodios más oscuros e intrigantes entre los rastros del nazismo en Argentina.