La investigación por la desaparición de Brenda del Castillo, Morena Verdi y Lara Gutiérrez tuvo el peor desenlace. Este miércoles, familiares confirmaron que los cuerpos hallados en una vivienda de Florencio Varela pertenecen a las tres jóvenes que habían sido vistas por última vez el viernes pasado en La Matanza.
El hallazgo se produjo en una casa del barrio Villa Vatteone, donde efectivos de la DDI de La Matanza encontraron los cadáveres enterrados en el patio tras detectar la señal del celular de una de las víctimas en una antena cercana. Según fuentes policiales, en el lugar había un fuerte olor a lavandina y se hallaron rastros de sangre.
La vivienda estaba ocupada por la dueña y su pareja, quienes fueron detenidos en un hotel alojamiento. También hay otros dos sospechosos apresados, lo que eleva a cuatro el número de detenidos por el caso.
Un almacenero del barrio aportó un testimonio clave: aseguró que atendió al novio de la dueña de la casa con un corte en la mano y que dejó manchas de sangre en su negocio. “Con la noticia esta, uno se desayuna todo esto. Es inesperado porque el barrio es tranquilo”, relató el vecino en diálogo con TN.
El abuelo de dos de las víctimas, Antonio, confirmó la trágica noticia a la prensa: “Pasó el desenlace que no queríamos, pero los investigadores nos confirmaron que sí, son ellas”.
Brenda y Morena tenían 20 años y Lara apenas 15.
En conferencia de prensa, el ministro de Seguridad bonaerense, Javier Alonso, vinculó el crimen con una red narco internacional: “Las chicas cayeron en una trampa de una organización transnacional de narcotráfico que había planificado asesinarlas. Todo da cuenta de una venganza narco”.
Los investigadores continúan con medidas para determinar la participación de autores materiales e intelectuales del crimen que conmociona al conurbano bonaerense.