Artistas, actores, actrices, músicos, músicas, espacios culturales y demás trabajadores de la cultura de la provincia se reunieron para solicitar a los gobiernos provinciales y municipales la planificación de acciones frente a la imposibilidad de generar ingresos debido al aislamiento, como también la urgencia de que el Ministerio de Cultura y Turismo de la provincia pague las deudas que mantiene desde antes de la pandemia.
En este sentido, manifestaron un “total abandono por parte de los organismos oficiales y una falta de propuestas y políticas públicas ante la crisis”.
A través de un comunicado sostuvieron que, “el aislamiento social, preventivo y obligatorio decretado por el gobierno el 20 de marzo del 2020, para frenar el avance del coronavirus, trajo aparejada graves consecuencias en el ámbito de la cultura, generando una gran crisis e impactando profundamente en su economía. Sus actividades fueron las primeras en parar y, por lo visto, serán una de las últimas en reactivarse. Es una situación asfixiante, sin actividad y sin subsidios estatales.
Ante esta situación de emergencia, los y las trabajadoras de la cultura de Catamarca nos hemos reunido para visibilizar el total abandono por parte de los organismos sociales del estado provincial y municipal, el desconocimiento de las necesidades reales del sector -uno de los históricamente más precarizados y actualmente más golpeados- y la falta de propuestas y políticas públicas ante la crisis que estamos atravesamos.
En este contexto, en primera instancia es imperioso que el ministerio de Cultura y Turismo cumpla con el pago de deudas previas a la pandemia. También entre los puntos destacados de esta reunión se debatió sobre la necesidad de que se explicite el presupuesto del ministerio y se reasignen las partidas para festivales masivos que por el distanciamiento social no se realizarán y discutir sobre la redistribución general del presupuesto que solo atiende a ciertos sectores de la “cultura” y del entretenimiento masivo. Asimismo, y como ha sido el caso en otras provincias vecinas, se lancen líneas de fomentos, subsidios y becas no concursables provinciales y municipales específicas para trabajadores de la cultura y centros culturales. Además se habló de la necesidad de otorgar beneficios impositivos a trabajadores de la cultura así como también tarifas de servicios diferenciadas para espacios culturales que están atravesando un momento crítico: sin poder abrir, sin recibir ingresos, pero que deben afrontar el pago de sus alquileres y servicios. Que se habiliten espectáculos artísticos en bares y restaurantes, así como espectáculos al aire libre, con las medidas de seguridad y protocolos pertinentes, siendo cultura quien subsidie el cachet de los y las artistas. Es imperiosa la asistencia a trabajadores de la cultura que se encuentren en situación de alta vulnerabilidad y se ponga en conocimiento de la comunidad toda cuales son los lineamientos generales del área y las propuestas particulares del sector”, finaliza.
