La victoria de Caracas ante el conjunto paraguayo de Libertad generó un revuelo en el grupo de Boca y puso las cosas parejas, a pesar de que el equipo argentino tiene que responder ante Independiente de Medellín para estar al día con la cantidad de partidos y así poder acercarse a la clasificación.
Con Russo en Buenos Aires por precaución, Leandro Somoza volverá a dirigir al equipo desde el banco de suplentes y la decisión del cuerpo técnico fue la de repetir los 11 jugadores que derrotaron al “Gumarelo” en Asunción con un gran rendimiento y un cómodo resultado por 2 a 0.
De esta manera, Boca quiere mantener en cero el puntaje del DIM en la zona y salta al campo del Atanasio Girardot con Esteban Andrada; Leonardo Jara; Carlos Zambrano, Carlos Izquierdoz, Emmanuel Mas; Eduardo Salvio, Jorman Campuzano, Guillermo Fernández, Gonzalo Maroni; Carlos Tevez y Franco Soldano.
Desde el arranque, Boca puso las condiciones de juego y apostó al juego asociado pero sin profundidad, obligando a Tevez y Soldano a salir a jugar. Sin embargo, desde la pelota parada tuvo las chances más claras, ambas en los pies de Carlitos, pero sus remates no causaron peligro.
La mala noticia para los de Somoza iba a llegar con casi media hora de partido cuando Gonzalo Maroni sintió una molestia y obligó al ingreso de Agustín Obando en el sector izquierdo. Sin embargo, el cambio de aire no permitió cambios en la ofensiva y el “xeneize” se fue al descanso sin sufrir, pero con el marcador en cero.
En el segundo tiempo, Boca no mantuvo el nivel de ataque del primero y le costó llegar al ataque, a pesar de pisar el área de Mosquera en varias oportunidades. A pesar de los errores en las definiciones, el equipo de Russo iba a encontrar el tan esperado gol, producto de un horror defensivo.
Un pase corto en la salida permitió que Capaldo se fuera mano a mano con el arquero, pero su definición no pudo con el colombiano. En el rebote llegó Salvio que la luchó y convirtió el 1 a 0 a los 86 minutos, que hacen que el “Xeneize” se escape en la cima y sabe que un empate como local lo clasifica a la siguiente ronda de la Copa Libertadores.