La nueva ministra de Economía tuvo su primer contacto con Kristalina Georgieva y se comprometieron a trabajar juntas.
La salida de Guzmáz despertó el temor a que haya un cambio hacia políticas de mayor gasto, en medio de una elevada inflación, además de la preocupación de que trate de cambiar los términos del acuerdo del FMI.
“El mundo está cambiando muy rápidamente, pero ella se comprometió con los objetivos del programa y se comprometió a trabajar con el Fondo de forma constructiva para lograr estos objetivos”, dijo Georgieva.
Argentina se enfrenta a un “momento muy complejo, muy difícil”, dijo, y el FMI haría lo posible para ayudar a las autoridades argentinas a hacer frente a la inflación.
“La ministra (…) entiende el propósito de la disciplina fiscal y también entiende que si se quiere ayudar a los pobres no puede ser en condiciones de inflación galopante”, indicó Georgieva.
A la pregunta de si Batakis impulsaría cambios en el programa del FMI, Georgieva sostuvo que Guzmán también tenía puntos de vista diferentes a los del fondo en ocasiones y que era importante llegar a un consenso explorando diferentes opciones.
“Tenemos que tener claro que a veces son necesarias acciones dolorosas para cosechar los beneficios de estas acciones”, dijo.