El Ministerio de Salud de la Ciudad de Buenos Aires confirmó un cuarto caso de sarampión en el territorio porteño, sumando un nuevo desafío en la lucha contra la enfermedad. Se trata de una adolescente de 18 años, residente en cercanías de los casos previamente identificados, que comenzó con fiebre el 19 de febrero y desarrolló conjuntivitis, uno de los síntomas característicos de la enfermedad. Tras realizarse las pruebas diagnósticas, el resultado confirmó la presencia del virus de sarampión.
Este nuevo caso activó rápidamente las alertas sanitarias, y según informaron desde la cartera sanitaria porteña, la paciente se encuentra en seguimiento clínico ambulatorio. A diferencia de los primeros casos, la adolescente no tiene antecedentes de viaje, lo que hace más importante el rastreo epidemiológico de los contactos previos y la intensificación de las medidas de prevención.
En cuanto a los casos previos, el primer afectado fue una niña de seis años que había viajado a Rusia, Vietnam, Emiratos Árabes y Brasil, y que comenzó con fiebre el 29 de enero. Su hermana de 20 meses también fue afectada y no tenía antecedentes de vacunación. El tercer caso, un adulto de 40 años, fue diagnosticado el 14 de febrero, y aunque se refirió vacunación completa, su cuadro se complicó con la aparición de tos y fiebre.
La Sociedad Argentina de Infectología (SADI) emitió una alerta, ya que el sarampión es una enfermedad altamente contagiosa que puede causar graves complicaciones, como neumonía, encefalitis y ceguera, sobre todo en niños menores de cinco años, personas inmunocomprometidas o desnutridas. La prevención sigue siendo clave, y las autoridades recomiendan la vacunación con la triple viral como la herramienta más eficaz para contener el brote.
Con el objetivo de reforzar la inmunización en la comunidad, el Ministerio de Salud de la Ciudad ha ampliado los horarios de los vacunatorios, incluyendo la atención durante los fines de semana en hospitales clave como el Durand y el Santojanni. También se han dispuesto unidades sanitarias móviles en puntos estratégicos para facilitar el acceso a la vacuna. Además, se está trabajando en colaboración con el Ministerio de Educación para revisar el estado de vacunación de los estudiantes.
La vacunación es gratuita y está disponible en todos los centros de salud habilitados. Las autoridades insisten en que la inmunización no solo protege a los individuos vacunados, sino que también ayuda a frenar la circulación del virus y proteger a los grupos más vulnerables, como los lactantes menores de un año.
Es importante que las personas con síntomas compatibles con el sarampión se dirijan a su centro de salud más cercano y tomen precauciones, como evitar el transporte público y usar barbijo para prevenir contagios.
El sarampión es una enfermedad viral que se transmite fácilmente a través de las gotículas respiratorias. Los primeros síntomas suelen aparecer entre 10 y 14 días después de la exposición y pueden incluir fiebre, tos, secreción nasal, ojos llorosos y erupciones en la piel. La vacunación sigue siendo la mejor defensa para evitar su propagación.