La reina Isabel II se encuentra bajo vigilancia médica en Escocia luego de que sus doctores expresaran su preocupación por la condición de la monarca. Así lo informaron desde el Palacio de Buckingham.
“Tras una nueva evaluación esta mañana, los médicos de la reina están preocupados por la salud de su majestad y han recomendado que permanezca bajo vigilancia médica”, explicaron.
Los antecedentes
La atención sobre la salud de Isabel II comenzó en octubre del año pasado cuando fue internada para un chequeo médico. Aunque en ese momento se informó que se encontraba bien, desde entonces la reina británica fue limitando su agenda.
Durante el Servicio de Acción de Gracias del Jubileo de Platino en la Catedral de St Paul no participó después de experimentar “incomodidad” el día anterior.
Y en julio, por primera vez en su reinado no abrió el período legislativo en el Parlamento, tarea que recayó en el príncipe Carlos, lo que fue visto por los analistas como el inicio de una transición progresiva en la corona de Reino Unido.
El miércoles, la reina debió retirarse de una reunión virtual del consejo privado, lo que también despertó sospechas sobre el real grado de los problemas que la aquejan.