Un tribunal de Reino Unido autorizó el lunes la desconexión de niño de 12 años con muerte cerebral en medio de una disputa legal entre su familia y los médicos que lo tratan, quienes aseguran que no tiene posibilidades de recuperación.
Se trata de Archie Battersbee, internado en el Royal Hospital de Whitechapel, en el este de Londres, que sufrió daños cerebrales el pasado 7 de abril, cuando sus padres lo encontraron inconsciente, presumiblemente al haber participado de un reto o juego viral en internet.
Los médicos que lo tratan le dijeron al tribunal que era “muy probable” que el niño presente “muerte cerebral” y pidieron desconectarlo de su soporte vital.
La jueza Justice Emma Arbuthnot dictaminó que el niño tiene daño cerebral irreversible, por lo que debería ser desconectado de las máquinas que lo mantienen con vida.
En su dictamen, autorizó a los profesionales médicos del Royal London Hospital a desconectar el respirador mecánico del niño, no seguir con la administración de medicamentos y no intentar ninguna reanimación cardíaca o pulmonar cuando cese la potencia cardíaca o los esfuerzos respiratorios.
La magistrada también indicó que si Archie Battersbee “continúa con ventilación mecánica, el desenlace probable es la muerte repentina y las perspectivas de recuperación son nulas”.
“Encuentro que Archie murió al mediodía del 31 de mayo de 2022, poco después de que se hicieran las resonancias magnéticas ese día. Creo que se ha establecido de manera concluyente el cese irreversible de la función del tronco encefálico”, escribió en su sentencia.
Sin embargo, los padres del niño, Hollie Dance y Paul Battersbee, que apelarán la sentencia, sostienen que el corazón de su hijo continúa latiendo y quieren que el tratamiento continúe.
Su madre dijo que está “extremadamente decepcionada” por la decisión de la jueza de poner fin a su soporte vital, pero afirma que no renunciará a su hijo.
“Basar este juicio en una prueba de resonancia magnética y en que sea ‘probable’ que esté muerto, no es suficiente. Esta debe ser la primera vez que alguien haya sido declarado ‘probablemente’ muerto en base a una prueba de resonancia magnética”, dijo.
Aseguró sentirse “asqueada” por que el hospital y la jueza no hayan tenido en cuenta los deseos de la familia, y agregó que no creía “que a Archie se le haya dado suficiente tiempo”. “Su corazón todavía late, me ha agarrado la mano y, como su madre, sé que todavía está allí”, dijo.
La familia de Archie también está pidiendo a la gente que asista a una vigilia por el nene en las puertas del hospital.
Esta no es la primera vez que la justicia de Reino Unido autoriza la desconexión de un menor en contra de la voluntad de sus padres.
En 2018 el caso de Alfie Evans recorrió el mundo. El pequeño de apenas 21 meses de vida, que padecía una condición degenerativa neurológica no diagnosticada, fue desconectado del soporte vital tras un fallo del Tribunal Supremo de Reino Unido que apoyó el pedido de los médicos.
La justicia entonces corroboró que el bebé “había perdido la capacidad de escuchar, ver, oler o responder al tacto debido a la catastrófica degeneración de su cerebro”. “Mantener al niño conectado a la máquina de ventilación pulmonar comprometería la futura dignidad de Alfie”, concluyó.