El polaco Szymon Marciniak estuvo en el triunfo de la Selección por 2-1 ante Australia en los octavos de final de esta Copa del Mundo.
El árbitro Szymon Marciniak fue designado para dirigir la final del Mundial de Qatar entre la Argentina y Francia el próximo domingo 18 de diciembre en el Estadio de Lusail.
No es la primera vez que el polaco de 41 años dirige a la Albiceleste en esta Copa del Mundo: ya estuvo en la victoria por 2-1 ante Australia por los octavos de final.
A Messi no le fue muy bien con este árbitro: suma dos derrotas con el Barcelona, un empate en el debut del Mundial de Rusia ante Islandia y la victoria ya mencionada ante el elenco de Oceanía en esta Copa.
Quién es el árbitro de la final entre Argentina y Francia
Nacido el 7 de enero de 1981 en Plok, Marciniak es conocido principalmente por su carrera arbitral, pero esconde detrás una curiosa etapa como futbolista semiamateur.
“Era mediocampista central, un líder. Pero para ser sincero, estaba un poco loco”, recordó sus tiempos en el plantel de Wisla Plock, el equipo de su ciudad natal.
Su final anticipado llegó durante un encuentro en el que fue expulsado y descargó su furia contra el juez de ese partido: “No estaba de acuerdo con la decisión del árbitro y le dije que era uno de los peores árbitros que había visto en mi vida”.
“Él me contestó: ‘De acuerdo. Si pensás que es un trabajo fácil, intenta hacerlo’”, contó. Marciniak se tomó muy en serio el desafío: apenas dos semanas después, comenzó a prepararse para ser árbitro.
Gracias a esa decisión, cambió su vida. Comenzó en 2002 su carrera de árbitro y, tras casi una década, le llegó una oportunidad única. Es que fue seleccionado por el Centro de la UEFA para la Excelencia del Arbitraje (CORE) para perfeccionarse en su labor. Estuvo bajo las órdenes del exárbitro británico David Elleray. “La persona más importante de mi carrera”, lo definió.
Su debut como árbitro internacional llegó el 16 de septiembre de 2014, nada más y nada menos que en un partido de Champions League: fue victoria de la Juventus ante Malmö por 2-0, en la primera fecha de la fase de grupos. Desde entonces, su carrera solo fue en ascenso: dirigió partidos en la Eurocopa, en la Copa Árabe de la FIFA, en la Europa League, en la UEFA Conference League, en la Copa Mundial Sub-20 de 2017 y en el Mundial de Rusia 2018. En la última Copa del Mundo, justamente, se cruzó con Messi y la Selección argentina por entonces comandada por Jorge Sampaoli.
Hasta el momento, tiene 549 partidos en su historial. En ellos mostró 2210 tarjetas amarillas y 67 rojas. Además, tiene un muy alto promedio de penales cobrados, con un total de 244. Es decir uno cada 2,25 partidos.
Es un árbitro partidario de dejar jugar, evita cortar las jugadas con insistencia y no suele ser de dialogar con los jugadores.