La recaudación del principal impuesto que cobran las provincias, Ingresos Brutos, cayó en marzo el 17,5% real en comparación con igual período del año pasado; hecho que le puede generar complicaciones a las intenciones de la administración de Javier Milei de pasarle a los gobernadores una parte de la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Los datos corresponden a la consultora Politikon Chaco, la que plantea que entre enero y marzo ese tributo dejó de aportar un 9,6% respecto de igual período del año pasado.
Al explicar las causas de la caída, el titular de la empresa, Alejandro Pegoraro, detalló que el escenario de cada provincia es muy diferente y por lo tanto existen distintas causas que pueden afectar a los ingresos, pero aclara que “el punto en común” que hay entre todas es la “merma del consumo, el incremento de la irregularidad y la desinflación”.
Sobre todo cuando los precios se desaceleran implica que las provincias recaudaron en términos relativos más el año pasado que ahora, porque los precios eran más altos. Es el efecto contrario que se genera cuando la inflación sube.
Cabe recordar que el Impuesto a los Ingresos Brutos es un tributo a la facturación y por su poder recaudatorio corre en paralelo a los precios, pero también es muy sensible a la informalidad.