Julio cerraría con una inflación cercana al 3%, exhibiendo una desaceleración con respecto al 3,2% de junio y marcando el dato más bajo en lo que va del año. Incluso, algunas consultoras estiman que la suba del IPC se ubicará por debajo de esa cifra, algo que no ocurre desde septiembre de 2020.
Para las consultoras Eco Go y Orlando Ferreres, el incremento en los precios minoristas de este mes se ubicó en el 3%. Algo más baja es la proyección para el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (CESO), que la situó en 2,9% en sintonía con el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) publicado por el BCRA.
“Se registró una variación grande en el rubro bebidas, sobre todo. Lo alimentos secos se ubicaron por debajo del promedio, en torno del 2,7%”, analizó Nicolás Pertierra, economista jefe del CESO, quien de cara a los próximos meses señaló: “La vemos bajando, pero lentamente. De cara a fin de año, se ubicaría en el rango del 2% o 2,5%”.
Aunque aclararon que aún restaba por cerrar el análisis de la segunda quincena, desde Ecolatina señalaron que en los primeros quince días del mes los precios minoristas subieron un 2,6%, con una desaceleración en alimentos producto de una menor alza de la carne (1,5% en la primera quincena).
“Me parece importante destacar que dentro de alimentos se desaceleró el rubro carnes, sobre todo por lo que pasó en el mercado de Liniers, donde se había visto una baja en los precios de la Hacienda y finalmente lo que vimos ahora es que se trasladó al precio minorista. Por eso, más que nada, es que alimentos se desaceleró. Porque consumo masivo no aflojó demasiado”, señaló Agostina Myronec, analista de Ecolatina.
De cara a los próximos meses, se espera que la tendencia continúe. Y, camino a las elecciones, la inflación puede estabilizarse por debajo del 3%. “Previo a noviembre se espera una desaceleración. Vemos una inflación piso de 2,5%. Puede desacelerarse, anclada sobre todo con lo que es servicios y las tarifas congeladas. Pero va a haber una inflación núcleo por encima de la inflación general, que es aquella que no depende ni de los regulados ni los estacionales”, analizó al respecto Damián Di Pace, director de la consultora Focus Market.
En ese contexto, las consultoras relevadas en el REM esperan una inflación para el 2021 en torno al 48%, que significaría un salto de 11,9 puntos porcentuales con respecto al 36,1% registrado en 2020.