La penúltima noche de la 52° edición de la Fiesta Nacional e Internacional del Poncho se caracterizó por conjugar una mixtura de géneros musicales, en la cual se fusionaron el pop latino de MYA con el rap de Callejero Fino y el tradicional folclore en manos de los siempre destacados artistas catamarqueños.
Por eso la noche del sábado, se pudo ver entre el público a miles de adolescentes y jóvenes que llegaron atraídos por los artistas urbanos que le dieron una impronta diferente al tradicional festival.
La formación de MYA entregó sus canciones a partir de un repertorio basado en pop latino Este dúo formado en 2017 y que encabezan las voces de Máximo Espíndola y Agustín Bernasconi, le puso color con sus baladas a una noche especial y distinta. “Corazón Guerrero” y “Como más nadie” fueron algunas de las composiciones más aplaudidas por los presentes.
En el cierre, la propuesta de Callejero Fino se instaló en el Escenario Mayor, alcanzando las expectativas que generaba el debut de un artista urbano en su primera actuación en la mayor fiesta de los catamarqueños. Simón Alvarenga entregó sus composiciones y le permitió a los catamarqueños disfrutar del RKT o rap de barrio, un estilo está copando los festivales más importantes del país. “Pa Tra Remix” y “En la Intimidad” fueron algunos éxitos que levantaron fuertes aplausos.
Promediando la noche, el tradicional clima festivalero estuvo presente en la noche a través de la puesta en escena de artistas catuchos, entre los que se distinguió Alico Espilocín con su trabajo denominado “Cuando Baila Pepe Díaz”, un homenaje a la extensa y valiosa trayectoria en la danza del bailarín catamarqueño. Un cálido y emotivo abanico de canciones ratificó el constante trabajo que lleva adelante en la música catamarqueña.
La recientemente galardonada como Revelación en el festival de Jesús María, Loy Carrizo, apeló a un repertorio en el cual contó su historia a través de sus propias composiciones. La cantautora confirmó su talento y pasión y dejó en evidencia las razones de la cosecha de distinciones y méritos que está teniendo su canto en todo el país. Una voz que ya cruzó fronteras y deja bien en alto la bandera del folclore catucho.
Freddy Romero y Federico Miranda se sintieron, otra vez, como en el patio de su casa, entregando sus tradicionales y clásicos repertorios, con canciones bien festivaleras que motivaron a los presentes a bailar. Las formaciones de La Cuja, Las Voces del Viento y la pomanista Sonckoy Suma dejaron su sello artístico en el escenario, dejando bien en claro su vigencia y decisión de defender el cancionero local.
Al ritmo de su bandoneón, el tinogasteño Luis “Kaly” Barrionuevo puso en escena aquellas fiestas tan tradicionales en el interior de la provincia, donde la música y las ganas de bailar parecen no tener intenciones de concluir jamás. La delegación proveniente de Paclín contribuyó con el color y la danza para mostrar sus paisajes, a lo que se sumaron las actuaciones del Estudio de Malambo “Chúcaros” y el reconocido Ballet Argentina.
Una noche tan especial como particular, en la cual se amalgamaron diversos géneros musicales y que celebró el público que se dio cita el sábado 22 de julio, en lo que fue la penúltima jornada del Poncho 2023.