Javier Milei participó de la cumbre de jefes de Estado en Brasil y no se guardó nada. Con un discurso crítico, el mandatario argentino afirmó que el Mercosur necesita una “reforma institucional e integral” urgente. Para Milei, el organismo hoy funciona con una estructura pesada que frena el desarrollo en lugar de potenciarlo.
Acompañado por el canciller Pablo Quirno, el Presidente señaló que, a pesar de los años, hoy no existe un verdadero mercado común ni una libre circulación efectiva de bienes. “La integración debe estar al servicio del comercio y no de la burocracia”, sentenció, advirtiendo que si el bloque no se moderniza, quedará estancado frente a un mundo que avanza rápido.
Los puntos clave de su exposición:
Nuevos aliados: Celebró la elección de José Antonio Kast en Chile, a quien llamó su “gran amigo”, y dio la bienvenida a Bolivia como nuevo miembro pleno.
Flexibilidad: Planteó que cada país debería tener más libertad para negociar acuerdos, ya que intentar avanzar siempre “en bloque” hace que se pierdan oportunidades, como ocurrió con el tratado con la Unión Europea.
Seguridad y soberanía: Volvió a apuntar contra Nicolás Maduro, exigió la liberación del gendarme Nahuel Gallo y agradeció el apoyo regional al reclamo por las Islas Malvinas.
