El presidente Javier Milei participó este domingo en la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC) en Camboriú, Brasil, evento liderado por Jair Bolsonaro, donde destacó la persecución judicial que, según él, sufre el ex presidente brasileño. Acompañado por su hermana Karina, el vocero presidencial Manuel Adorni y el ministro de Defensa Luis Petri, Milei centró su discurso en críticas al socialismo y señaló el presunto rol de Luis Arce en un supuesto golpe de Estado en Bolivia, sin hacer mención a Lula Da Silva, quien seguía atentamente la exposición.
Durante su intervención, Milei abordó la receta económica y cultural del socialismo en América Latina, criticando la expansión del gasto público y el uso de la emisión monetaria como soluciones a corto plazo. “Los socialistas inician con bonanza económica y terminan en endeudamiento y destrucción del valor de la moneda”, afirmó el mandatario argentino ante un público que coreaba consignas contra la izquierda.
El presidente argentino también mencionó casos como Venezuela y Bolivia como ejemplos de crisis institucionales derivadas, según él, de políticas socialistas. “El socialismo, al ir contra la naturaleza humana, inevitablemente conduce a la esclavitud o la muerte”, añadió, criticando duramente las expropiaciones y los privilegios otorgados a allegados de los gobiernos socialistas.
Al finalizar, Milei enfatizó su compromiso con un cambio profundo en Argentina, desafiando a los opositores del régimen que promueve. “Vamos a sacar al país adelante, con o sin el apoyo de los socialistas, porque la mayoría ha elegido un cambio que cumpliremos con firmeza”, concluyó el presidente argentino en un discurso marcado por la confrontación ideológica y la defensa de sus políticas.