El tiroteo ocurrió durante la madrugada en un salón de billar de Miami Gardens, al noroeste del centro de la ciudad costera. El local celebraba un evento, y varios organizadores se encontraban en el exterior del recinto cuando una camioneta todoterreno se acercó al lugar. ”Tres individuos salieron del vehículo y comenzaron a disparar indiscriminadamente contra la multitud”, añadió. Los tres atacantes volvieron a subirse al auto y huyeron.
A su llegada al lugar, los servicios de emergencia encontraron dos cuerpos y cerca de 20 heridos que fueron derivados al hospital. Uno de ellos en estado crítico.
En un tuit, el director del departamento de policía del condado de Miami-Dade, Alfredo “Freddy” Ramírez III, calificó el acto de “cobarde”. ”Son asesinos de sangre fría que dispararon indiscriminadamente contra una multitud y buscaremos justicia”, dijo. La policía buscaba la ayuda de la comunidad para identificar y detener a los tiradores.
Florida sigue marcada por el tiroteo de 2016 en la discoteca Pulse de Orlando, en el que un hombre armado mató a 49 personas e hirió al menos a otras 68.
Estados Unidos tiene una larga y dolorosa historia de violencia mortal con armas de fuego, con un número constante de tiroteos diarios, así como asesinatos masivos que han tenido como objetivo escuelas, lugares de trabajo y centros comerciales.
El año pasado se produjeron más de 43.000 muertes relacionadas con las armas en Estados Unidos, incluidos los suicidios, según el Gun Violence Archive.