La recaudación del IVA en agosto mostró una suba mínima y alerta sobre la debilidad fiscal

Los datos preliminares de la recaudación de agosto revelan un freno en los ingresos fiscales. El Impuesto al Valor Agregado (IVA), una de las principales fuentes de recursos tanto para el Gobierno nacional como para las provincias, habría crecido apenas entre 0,2% y 0,4% en términos reales, de acuerdo con estimaciones del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF) y de la consultora Politikon Chaco.

Este bajo desempeño estaría mostrando el impacto de un menor nivel de consumo en julio, mes que sirve de base para el cálculo del IVA. En un contexto en el que la economía aún exhibe un crecimiento interanual del 5% al 6% por comparación con 2024 —año en que la actividad recién comenzó a repuntar a fines de noviembre—, los indicadores desestacionalizados reflejan un amesetamiento.

El Gobierno esperaba un repunte mucho mayor que le permitiera compensar la pérdida de recursos por la eliminación del Impuesto PAIS —que aportaba alrededor del 1% del PBI— y por las rebajas de retenciones al agro aplicadas después de junio. Sin embargo, la recaudación no alcanza el ritmo necesario para cumplir con el compromiso asumido ante el FMI de lograr un superávit primario del 1,6%.

En el mercado ya se anticipa un refuerzo del ajuste fiscal en lo que resta del año. Incluso, el propio presidente Javier Milei dejó entrever esa posibilidad durante su discurso en el almuerzo del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICYP).

La coparticipación, otra señal de alerta
En agosto, las transferencias automáticas a las provincias totalizaron $5,1 billones, lo que implicó un crecimiento del 2,1% real. Este resultado se explicó principalmente por el desempeño del Impuesto a las Ganancias, que registró un aumento del 11% real gracias a un cambio normativo que obliga a las empresas a pagar anticipos más elevados que en 2024.

De todos modos, al considerar en conjunto IVA y Ganancias, los dos tributos más relevantes para la coparticipación, la mejora en los primeros ocho meses del año fue de apenas 1% real, según cálculos del IARAF.

Politikon Chaco, por su parte, advirtió que otros impuestos coparticipables tuvieron caídas pronunciadas: los Internos (-22,8%) y el resto de los tributos compartidos (-23,5%). Los únicos que mostraron incrementos fueron el Impuesto a los Combustibles Líquidos (+47,8%), el Régimen de Energía Eléctrica (+204,3%) y el Monotributo (+223,9%), en todos los casos por cambios normativos respecto al año pasado.