Tras haber ganado las elecciones primarias, el candidato presidencial de La Libertad Avanza, Javier Milei, que en los últimos días se metió en una polémica tras haber manifestado sus intenciones de acercarse a Mauricio Macri, volvió a hablar de lo que habría en caso de obtener un resultado que le permita ser el próximo presidente.
En diálogo con La Nación+, afirmó que su plan no incluye despedir a la totalidad de los empleados públicos, aunque, señaló que “es necesario aplicar la motosierra en sectores como la obra pública, las transferencias discrecionales, los subsidios económicos, los privilegios y las empresas del sector público”.
Además, el economista, que en los últimos días ha moderado su discurso, dejó en claro que “nunca dije que las cosas sean instantáneas”, y añadió que “proponemos un conjunto de reformas estructurales para que la Argentina en un lapso de 25 a 45 años vuelva a ser una potencia.
Por otro lado, se refirió a la política exterior que llevaría adelante y, aunque aclaró que no impediría el comercio con China y Brasil, agregó que “mis socios estratégicos serían Estados Unidos e Israel”.
Por último, sobre su victoria en las PASO aseguró que “los argentinos tomaron consciencia de que una Argentina distinta es imposible con los mismos de siempre”, y que “es una forma de canalizar el ´que se vayan todos´ del 2001, porque están los mismos y se multiplicaron”.