Tras el levantamiento del cepo cambiario, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, aseguró que no habrá una devaluación brusca del peso argentino y que el Gobierno se encuentra confiado en la solidez del nuevo régimen cambiario adoptado, en el marco del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
En diálogo con Radio Rivadavia, Francos fue consultado sobre la posibilidad de un salto en el tipo de cambio oficial a partir del lunes, cuando reabran los mercados. “Estamos muy tranquilos”, respondió, y agregó: “No va a pasar, seguramente. Pero en los hechos, si pasa, por ahí el martes está $1.200, el día siguiente $1.100 y el jueves $1.000. Nadie puede establecer o suponer que va a pasar una cosa o la otra”.
El jefe de ministros sostuvo que el país cuenta con suficientes reservas en dólares, producto del acuerdo con el organismo internacional, en relación con la cantidad de pesos circulantes. “Hemos tomado una decisión que va a tener un impacto muy grande en la economía de la Argentina”, dijo. Además, aseguró que esta medida contribuirá a acelerar el proceso de inversiones impulsado por la Ley Bases.
Respecto a la coordinación con el FMI, Francos remarcó que la liberación del tipo de cambio no fue una exigencia directa del Fondo, sino una acción consensuada: “Este tema lo venimos hablando hace ocho meses. Es parte de un plan trabajado con mucha disciplina, claridad entre ambas partes y consenso”.
Por otro lado, explicó que el nuevo entendimiento con el FMI no responde a una situación de crisis aguda, sino a una estrategia preventiva: “Uno acude al FMI cuando tiene una emergencia, déficit, una crisis. En este caso, se fue con variables diferentes: para refinanciar la deuda que se tiene, para utilizar esos recursos para garantizar el capital del Banco Central y evitar cualquier corrida cambiaria”.
Finalmente, al ser consultado por la inflación de marzo, que alcanzó el 3,7% con fuertes aumentos en alimentos y bebidas, Francos atribuyó la suba a una coyuntura particular: “Se trata de un efecto pasajero por la volatilidad política del debate legislativo y factores estacionales. No hay motivos estructurales para que haya inflación. Las reglas macroeconómicas son claras y la estabilidad de precios llegará”.