El Financial Times reveló que funcionarios cercanos al expresidente Donald Trump están estudiando mecanismos para incentivar que más países adopten el dólar estadounidense como moneda principal. La iniciativa busca fortalecer la posición global del dólar y frenar el avance de China, que desde hace años impulsa acuerdos bilaterales para reducir la dependencia del sistema financiero internacional de la moneda norteamericana.
De acuerdo con el medio británico, el economista Steve Hanke, profesor de la Universidad Johns Hopkins y reconocido defensor de los procesos de dolarización, mantuvo encuentros con funcionarios del Tesoro y asesores de la Casa Blanca. En esas reuniones se discutieron posibles herramientas que podría usar Washington para alentar políticas monetarias de ese tipo en distintos países.
“Lo están tomando muy en serio, aunque todavía no hay decisiones finales”, aseguró Hanke al diario.
En el análisis de los funcionarios norteamericanos, Argentina aparece mencionada como uno de los “candidatos naturales” a avanzar en la dolarización, debido a la recurrente pérdida de confianza en el peso y las dificultades para estabilizar la economía. La mención coincide con los esfuerzos recientes de Estados Unidos por contribuir a la estabilización financiera del país. No obstante, tanto Washington como Buenos Aires aclararon que, por el momento, la dolarización no está en debate oficial.
Hanke señaló que el caso argentino sería un ejemplo “obvio” para esa estrategia, junto con economías como Líbano, Pakistán, Ghana, Turquía, Egipto, Venezuela y Zimbabue, todas afectadas por procesos inflacionarios persistentes y crisis cambiarias. La iniciativa se enmarca en un contexto geopolítico en el que EE.UU. busca reafirmar la influencia del dólar frente al intento de China de expandir el uso del yuan en los mercados emergentes.
Desde la Casa Blanca reconocieron los contactos con Hanke, aunque precisaron que no existe una posición oficial sobre la promoción activa de la dolarización. Sin embargo, Trump ha reiterado en sus discursos que uno de sus objetivos es preservar la fortaleza del dólar como símbolo del liderazgo económico estadounidense.
En la Argentina, el tema resurgió durante la campaña presidencial de Javier Milei, quien propuso adoptar el dólar como parte de su plan de estabilización. Más tarde, el ministro de Economía, Luis Caputo, descartó su implementación inmediata por la falta de reservas internacionales, aunque no cerró definitivamente la posibilidad.
Por su parte, el Fondo Monetario Internacional (FMI) advirtió que un proceso de dolarización podría limitar el crecimiento económico y la capacidad de política monetaria del país. Aun así, voces del mercado financiero como Jay Newman, del fondo Elliott Management, consideran que ese sería el camino “para romper el ciclo de crisis recurrentes”.





